lapuebla de labarca. Una nueva alerta saltó ayer por la mañana cuando unas personas de los grupos de voluntarios vieron un bulto en el río Ebro, en la orilla riojana, y de inmediato se movilizaron los buzos para realizar varias inmersiones en el lugar del avistamiento, sin que la búsqueda diera resultados.
En el sexto día de recorridos por el río Ebro, en búsqueda de alguna pista para poder recuperar los restos de Vicente Garrido, el joven de Lapuebla de Labarca que desapareció en la zona de La Pobeda al ir a rescatar a uno de sus perros, la desesperanza fue el denominador común. Con todo, Txomin Garrido, el padre del joven, y Daniel Espada, alcalde de Fuenmayor, mantienen el ánimo insuflando confianza en las decenas de voluntarios que participan y entre los numerosos servicios de emergencia que allí están trabajando.
En la jornada de ayer, como había anunciado la coordinadora de Emergencias del Gobierno Vasco, todas las personas que forman el operativo son nuevas en esta operación, al haberse producido un relevo de efectivos. A ellos se sumaron un buen número de voluntarios de Cruz Roja de Álava, incluso con una lancha. Sin embargo, faltaron todas las fuerzas que se habían ido aportando desde La Rioja, como SOS-Rioja y Protección Civil de la comunidad vecina.
Quien sí acudió al lugar fue la consejera vasca de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, que permaneció una parte de la mañana en Lapuebla, donde estuvo conversando con el padre de Vicente y conociendo el caso para tratar de aportar más medios humanos y técnicos si era necesario, También estuvo el presidente de la Cuadrilla de Laguardia, Jokin Villanueva, que aprovechó la jornada de fiesta para calzarse las botas y ofrecer su colaboración como un voluntario más.
Hoy sábado continuará la búsqueda, aunque las esperanzas han ido decayendo tras conocerse la peligrosidad que tiene el río Ebro en los 2,4 kilómetros que se están mirando minuciosamente.