vitoria. El PNV presentó ayer en Tuvisa una solución para los problemas derivados de la implantación del sistema de avisos de parada para personas con discapacidades en los autobuses, que ha contado con el visto bueno del resto de partidos. El siguiente paso será que el gerente de la sociedad se ponga en contacto con la empresa para cerciorarse de que la propuesta en viable técnicamente, y ponerla en marcha.
A principios de octubre, el gobierno municipal inició este servicio, denominado Ciber-Voz, sin ningún tipo de consulta previa. Desde entonces se han sucedido quejas por las molestias que genera al funcionar ininterrumpidamente al lado de los chóferes. De hecho, la plantilla de Tuvisa había llegado a plantear medidas de presión si no se corregían los problemas que generaba este dispositivo. Esto ha motivado la suspensión parcial del servicio, con los inconvenientes que provoca a las personas que dependen de este sistema de avisos.
La solución planteada por los nacionalistas consiste en adaptar el sistema de máquinas canceladoras de los autobuses para que, a través de ellas, el sistema de voz se active sólo cuando accede al vehículo una persona con discapacidad. En este sentido, la tarjeta BAT integra un chip especial que identifica a estos viajeros y que serviría para activar el Ciber-Voz. En el caso de que accediera al autobús con billete ocasional alguien que necesite avisos de parada, también se integraría en la máquina canceladora un botón que permitiría activar el sistema.
Los cambios también afectan a la megafonía, cuya ubicación se situaría en la parte central del autobús. En los avisos de parada se pasaría a utilizar una voz humana en lugar de la artificial que se ha venido empleando hasta ahora y el volumen del altavoz se ajustaría a niveles razonables.
Todas estas propuestas son -según la edil Nerea Melgosa- el resultado de sentar en una mesa al comité de empresa de Tuvisa y los colectivos de personas con discapacidades. "Simplemente recurriendo al diálogo hemos resuelto un conflicto que el PP había generado por confrontar los derechos de la plantilla y de los usuarios del autobús. Frente a una imposición polémica hemos demostrado que es posible una solución consensuada", manifestó la jeltzale Melgosa.