La sede de la antigua Agencia de Revitalización de la Ciudad Histórica, Arich, en la Plaza Nueva está en venta. Y, si el Ayuntamiento de Vitoria se puede desprender de ella "al precio establecido por los técnicos", esa operación se realizará. Sin dudas. El alcalde de Vitoria, Javier Maroto, se mostró ayer dispuesto a aumentar las ventas de lonjas y parcelas municipales, en esa búsqueda de ingresos para paliar la difícil situación de las arcas municipales.

Preguntado ayer en conferencia de prensa sobre esta opción, la de vender la oficina de la Arich, situada en una zona privilegiada del centro, junto a la entrada a la Plaza Nueva por la calle Postas, a Maroto no le tembló el pulso: "Sí, es una posibilidad".

La opción de aumentar la venta de patrimonio municipal del suelo es una más de las herramientas de las que dispone el alcalde para cuadrar sus cuentas. Esta parte del presupuesto siempre ha generado suspicacias, porque si hay partidas que dependen de estos movimientos y finalmente no hay ventas, pueden decaer. Durante la pasada legislatura, el gabinete Lazcoz justificó en repetidas ocasiones la falta de ingresos con este capítulo porque no estaba dispuesto a "malvender" las propiedades municipales. De ahí que Maroto precisara aquello del precio "establecido por los técnicos".

Sin embargo, tras hablar de la deuda heredada, de la semiprivatización de Amvisa para obtener recursos, estas ventas de locales o parcelas sonaron como una opción viable. "Naturalmente, si podemos vender locales municipales que están vacíos, si podemos obtener dinero de arrendar ese tipo de locales, o vender parcelas al precio establecido por los técnicos, se trata de una forma de obtener ingresos. Es una buena posibilidad". Es más, aseguró que si es una decisión que depende de él, "la haré", y si exige un respaldo del Pleno, tendrá que buscar el socio que le asegure que la medida siga adelante.

"Es mi posición y creo que es la que toca", concluyó. Porque para el alcalde, la "ecuación es lógica": "Cada euro que se obtenga de la venta de un local vacío o de una parcela infrautilizada será un euro para no subir impuestos, que es algo que no quiero hacer, o un euro por el que no haya que hacer ajustes en los servicios de la ciudad".