vitoria. El alcalde corroboró ayer la posibilidad de privatizar parte de la sociedad municipal de aguas Amvisa después de que PNV y PSE denunciaran el plan de Javier Maroto. El Ayuntamiento ha encargado dos estudios -de los que aún se desconocen las conclusiones- para saber exactamente los recursos de los que dispone Amvisa y ver la posibilidad de convertirla en una sociedad mixta de capital público y privado. "En cualquier caso, el Ayuntamiento nunca perdería el control de la sociedad y se mantendrían todos los puestos de trabajo en las actuales condiciones", explican en Alcaldía.

Aun así, es una decisión que deben adoptar todos los partidos y, de momento, la oposición ya se ha manifestado en contra. "Poner precio a Amvisa en estos momentos es el primer paso para dejar en manos privadas una sociedad municipal estratégica, que nos asegura el suministro de un bien público tan esencial como el agua. El Ayuntamiento de Vitoria no puede prescindir de una empresa que garantiza el mantenimiento en manos públicas de un recurso escaso y fundamental. La obsesión del alcalde por hacer caja a toda costa puede suponer la pérdida de un patrimonio imprescindible para la ciudad", afirmó la edil Blanca Guinea.

Para los socialistas, se da la circunstancia de que "Amvisa es una sociedad que reporta beneficios a las arcas municipales porque aporta dinero, ocho millones de euros entre 2009 y 2011; beneficios que irían a parar a manos privadas, ya que el PP confirma su intención de vender el 49% del accionariado", lamentó la edil Marian Gutiérrez.

En esta línea, Bildu dejó claro que no está a favor de las sociedades públicas a las que considera opacas pero, sobre todo, está en contra de las privatizaciones, que solamente suponen el traslado de dinero público a bolsillos privados. "Si el alcalde busca la privatización de Amvisa, nos tendrá enfrente", manifestó el concejal Antxon Belakortu.

Por su parte, el PP defiende que es obligación del gobierno optimizar los recursos que tiene, y más en época de crisis. Recordar que Maroto también propuso en su día algo similar con el Centro de Estudios Ambientales (CEA).