E l emplazamiento fue tan directo y sorpresivo que cogió a todo el mundo por sorpresa. Tocaba contrarreplicar al alcalde, y el portavoz socialista, Patxi Lazcoz, empezó afirmando que para lo que iba a decir no necesitaba ni la mitad de los diez minutos que tenía asignados. "¿Tiene usted alguna cuestión personal contra mí?", dijo Lazcoz a un Javier Maroto cuya expresión corporal -las cámaras del Pleno le enfocaban a él- empezó mostrando incredulidad y acabó dejando ver un incómodo enfado. El alcalde miraba a un lado y al otro, tomaba alguna nota, se mesaba la barba, y esperaba con impaciencia a que su precedente en el cargo terminara de mostrar su queja. Por un momento, dada la directísima alusión de Lazcoz y los gestos del alcalde, pareció que fueran a dirimir sus diferencias, dicen que larvadas durante muchos años, en la calle, pero por contra del rifirrafe salió el compromiso por parte de ambos de empezar de cero.

Lazcoz acudió a una anécdota acaecida en el Consejo Social para ilustrar lo que entiende es una singular animadversión hacia su persona por parte el nuevo primer edil. "Estaban alucinando, decían que yo no hice ninguna referencia personal a usted y que el señor Maroto hizo un montón hacia mí", se quejó Lazcoz, que criticó además el que el alcalde les recrimine habitualmente su ausencia en la entrega del galardón Green Capital, en Bruselas. "Usted sabe que al único grupo que no se nos invitó a la presentación del premio en Madrid fue al PSE", acusó.

Para Maroto es propio de "niños de tres años" entrar a ver "quién es más amigo de quién", aunque por otro lado aseguró que le cuesta llevarse mal "con nadie. Es mi manera de ser -continuó-, aunque caeré más o menos gordo", dijo el alcalde, para quien lo que deben hacer los portavoces de los grupos es "ver hasta dónde se puede llegar para alcanzar acuerdos. Maroto recordó que el jueves apostó por "abrir una nueva etapa. Pues bien, intentémoslo", zanjó tras dar la mano al Lazcoz el primer edil, que cerró el debate con una última anécdota. El máximo representante de la ciudad esgrimió un portada de periódico en la que su homólogo bilbaíno, el jeltzale Iñaki Azkuna, aseguraba que "Maroto es un buen alcalde".