Vitoria. Es habitual en la gestión de un ayuntamiento transferir dinero de unas partidas a otras para afrontar distintas actuaciones. Pero cuando no queda claro qué movimientos se hacen, por qué y para qué, salta la alarma. Como ayer en el Consistorio de Vitoria. La oposición acusó al gabinete Maroto de falta de transparencia en sus operaciones: a simple vista, con la documentación facilitada a los grupos políticos, no sólo se hace difícil hacer un seguimiento correcto de las modificaciones presupuestarias, sino que parece que se están llenando departamentos tan sensibles como Asuntos Sociales y Promoción Económica con partidas que no les corresponden para que tengan más peso económico del real.

Los ejemplos concretos los puso Bildu. A tenor de la documentación, las partidas de la Vuelta Ciclista al País Vasco y el cine de montaña se han transferido a Asuntos Sociales, y el herri kirolak y las actividades náuticas a Promoción Económica. "¿No saben por dónde les da el aire o es que están engañando a la ciudadanía con una estrategia de despiste para disimular los recortes en estas áreas? Yo me quedo con lo segundo", denunció el edil abertzale Antxon Belakortu. El portavoz del PSE, Patxi Lazcoz, fue más cauto y prefirió pensar que la información facilitada "da lugar a errores o malas interpretaciones", pero no dudó en reprochar al gobierno la "falta de transparencia" que está conllevando la prórroga presupuestaria. También el edil del PNV Iñaki Prusilla exigió explicaciones, al tiempo que preguntó si es cierto que se ha retraído un millón de euros del Consejo Social, los centros de día, Tuvisa, la conservación de las zonas verdes y la depuración de aguas residuales al Casco Viejo, cuando para este barrio ya se ha fijado una inversión de quince millones.

La actitud del gobierno fue conciliadora, pero defensiva. El concejal de Hacienda, Manu Uriarte, atribuyó la estrategia de encubrimiento denunciada por Belakortu a una mala interpretación de los papeles, por lo que prometió más claridad en próximos capítulos. "Veo que este modelo de documentación no parece suficiente, así que ampliaremos la información y los contenidos", aseguró. Eso sí, de todos los ejemplos que citó Bildu sólo puntualizó el relativo a la Vuelta Ciclista. "Va en Servicios a la Ciudadanía", sostuvo. Para los casos del cine de montaña, el herri kirolak y las actividades náuticas no hubo ninguna explicación. En cuanto a las transferencias al Casco, el edil reconoció las operaciones y aseguró que las actuaciones que se han visto mermadas pueden llevarse a cabo con menos recursos.

Las explicaciones no apaciguaron las críticas. Bildu reiteró que se quieren maquillar los recortes en Asuntos Sociales y Promoción Económica, el PSE dijo que "nunca antes" la oposición había tenido que bregar con una documentación tan complicada de descifrar y el PNV mostró su preocupación por que la disolución de la sociedad municipal que gestionaba la reactivación del Casco vaya a suponer "quitar de otras partidas". Distintos reproches con un mismo fondo: la inquietud por la opacidad de los datos, derivada a su vez de una prórroga presupuestaria que ha impedido conocer y debatir las distintas partidas económicas.