vitoria. La máxima de austeridad que se ha autoimpuesto el gabinete Maroto para operar en Vitoria empieza a cobrar forma en los recortes salariales aplicados a los trabajadores de la propia casa. A partir de septiembre desaparecerán de las nóminas varios de los pluses económicos que cobraban algunos funcionarios municipales, una medida que ayer se confirmó oficialmente y que ha sonado a declaración de guerra en el seno del comité de empresa del Ayuntamiento gasteiztarra. Los afectados dejarán de percibir los complementos que ingresaban hasta ahora por trabajar por las noches o en festivos incluso estando de vacaciones y tampoco cobrarán el plus por conducir a menos de que sus atribuciones laborales conlleven desplazamientos en coche. El tridente del recorte se cierra con la eliminación del complemento del economato, que según reconoce el equipo de gobierno ha quedado obsoleto y se percibe vinculado a la paga extra de Navidad. El paquete de medidas lleva adjunta la advertencia de que se revisarán todas las dedicaciones y productividades de los funcionarios, un aviso a navegantes para que la plantilla se ponga las pilas y convierta en factible el "más con menos" prometido por el ejecutivo local. Como contrapartida, los funcionarios que estén de baja recibirán el 100% de sus retribuciones. Aunque el advenimiento del tijeretazo se anunció en julio, hasta ayer no se comunicó de manera oficial a los trabajadores. El encargado de hacerlo fue el concejal de Función Pública, Manuel Uriarte, a quien el comité de empresa del Ayuntamiento dirigió el grueso de sus dardos acusándole de carecer de voluntad negociadora.
Tras la reunión matutina mantenida ayer entre Uriarte y los portavoces del comité de empresa municipal, estos últimos recordaron que el Ayuntamiento se había comprometido a aparcar los descuentos hasta pactar su aplicación en el marco de la mesa de negociación del convenio, que ayer se reunía por primera vez. Al darse de bruces con el muro de la imposición de las restricciones, acusaron al concejal de Función Pública de haber "escenificado una parodia de negociación" para finalmente aplicar algo "decidido de antemano. No estamos de acuerdo con la eliminación de los pluses y variables, ya que además de recortar aún más nuestros derechos adquiridos la repercusión afecta únicamente a determinados colectivos, mayoritariamente de niveles bajos", aclararon.