ESCONDIDOS durante siglos entre edificios, descuidados y olvidados, los caños del Casco Viejo comienzan a ver la luz. El reciente proceso de rehabilitación de estos patios interiores continúa imparable y este año ya se habrán acondicionado la mitad de los existentes, según constató ayer el gerente de la Agencia de Revitalización de la Ciudad Histórica, Gonzalo Arroita. Y es que, la Arich acaba de renovar el convenio con la asociación ecologista Gaia para seguir desarrollando el programa Pliegues, cuyo objetivo es revalorizar estos espacios urbanos y recuperarlos para la memoria de la ciudad y para su vecindario. Sin embargo, la intervención no queda ahí.
La Arich prepara para junio una semana de festejos, con música y poesía, para dar a conocer y disfrutar los caños coincidiendo con el solsticio de verano. Así lo anunció Arroita tras afirmar que la intervención en los caños supone "una de las actuaciones más rentables si se tiene en cuenta lo gastado y las ventajas que aporta al vecindario. Y es que, hay inquilinos del Casco Viejo que jamás hasta ahora habían podido abrir las ventanas que dan a los patios para disfrutar de un espacio limpio, sin olores y con olor a flores.
El convenio rubricado entre Arroita y Gregorio Alonso Vallejo, en nombre de la fundación Gaia, supone el establecimiento y la regulación de la colaboración entre ambos agentes para desarrollar actuaciones de revitalización integral de los caños desde su perspectiva social, urbanística y cultural. No hay que olvidar que las propuestas de actuación van encaminadas a devolver y potenciar a los caños tanto su valor histórico y patrimonial, como su función de espacio urbano de aireación, luminosidad y respiro para las viviendas de su entorno.
entre santo domingo y barrancal
Cantón del Verdugo
En este sentido, Arroita anunció que se procederá a la rehabilitación inmediata sobre el caño del Verdugo, antes denominado Caño 13. Se sitúa entre la calle Santo Domingo y Barrancal y presenta deficiencias importantes y un uso irregular. Así, la actuación va encaminada a evitar consolidar una ocupación indebida y la práctica de actividades irregulares. Asimismo, deberá decidir sobre la próxima reforma de otros dos caños: el caño del Monaguillo, antes denominado Caño 9, y el caño de la Plazoleta, antes Caño G.
El primero está ubicado entre las calles Txikita y Santo Domingo. Tiene dos accesos, uno desde el 118 de la Correría y otro desde el cantón de Santa María 7. Con una longitud de 160 metros y una superficie aproximada de 320 metros cuadrados, está dividido en dos partes por la existencia de una construcción fuera de ordenación, a la altura del número 12 de la calle Txikita, que interrumpe su continuidad para atravesarlo de un lado a otro.
El segundo está ubicado entre las calles Herrería (del 2 al 22A) y Zapatería (del 1 al 27), en la primera vecindad, desde la Plaza de La Virgen Blanca hasta el cantón de San Roque. Tiene una longitud de 77 metros y una superficie aproximada de 272 metros cuadrados. Es un caño en fondo de saco al que se accede sólo desde la plazoleta del cantón de San Roque. Una de sus peculiaridades es que en la zona media existe un desnivel longitudinal con una profundidad de 2,4 metros respecto al nivel del resto del caño, a la que sólo es posible acceder por una escalera con una pendiente muy elevada y escasa protección.
Las actuaciones previstas van dirigidas a acondicionar los accesos, dar solución a los problemas de saneamiento, pintar y tratar la parte inferior de las fachadas, aplicar reformas en el pavimento, limpiar e higienizar los caños, instalar tomas de agua para limpieza y riego y colocar jardineras con diferentes plantas.