El Ayuntamiento aboga por crear un carril lento (40 km/h) en el corredor que se libere tras el soterramiento de las vías del tren. Este vial, que unirá el este y oeste de la ciudad, tendrá espacio para las bicis y el transporte público entre Salburua y Zabalgana. En un informe, el Consistorio analiza los efectos que las obras tendrán en la calidad de vida de la ciudad, ya que se cerrará la conexión este-oeste y habrá problemas de tráfico en América Latina, y propone 200 recomendaciones .