Vitoria. Cuando un gran proyecto acaba convirtiéndose en un agujero negro, ni la cabeza pensante ni la mano ejecutora pueden escapar de la obligación de ofrecer explicaciones. Y en ésas se encuentran ahora el PP y el PSE, a costa de los planes de modernización de los dos grandes complejos deportivos de la ciudad. Como desveló el lunes DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, las obras, aprobadas hace seis años durante el gobierno de Alfonso Alonso, han acumulado un desfase de casi 11,5 millones de euros y el escandaloso retraso de dos años en la inauguración de las cubiertas de Mendizorroza. Un sobrecoste del que nadie quiere responsabilizarse, pero que ha puesto en pie de guerra a todos los grupos municipales, dedo acusador en alto.
¿Y quién tiene la culpa del desastre? El gabinete Lazcoz apunta a su predecesor al frente del gobierno. El PP tasó las reformas en 24 millones de euros -la mitad para cada complejo-, pero en sus cálculos dejó fuera servicios básicos, como la estructura de la pileta de las cubiertas de Mendizorroza, el sistema de separación de la piscina olímpica en dos o el acondicionamiento de la zona exterior. Unos errores que el PSE tuvo que enmendar al llegar al poder reajustando los proyectos y que, según este partido, han conllevado el desfase económico y los retrasos. El acusado, sin embargo, no duda en devolverle la pelota. El concejal popular Alfredo Iturricha recordó ayer que el proyecto de Mendizorroza y Gamarra salió adelante gracias al apoyo del PSE, que además pactó el Presupuesto donde aparecían estas obras, y el PNV. "Y se sabía que la piscina, que iba a ser muy especial para poder acoger competiciones de relieve, iba aparte", se excusó el edil, aunque no explicó por qué tampoco entraron en los planteamientos iniciales otros elementos como, por ejemplo, la escalera de emergencia.
El resto de grupos municipales coincide en algo con el gabinete Lazcoz. El PP se marchó de la Alcaldía dejando "un marrón", pero aun así, el gobierno socialista no se salva de las críticas de la oposición. El PNV, EB y EA le acusan de no haber facilitado información sobre el agujero que se estaba creando y los retrasos pese a exigírsela varias veces. Así que la comparecencia del alcalde que ha solicitado EA se prevé caliente.
"Lazcoz heredó un marrón espectacular, pero ha pecado de oscurantismo, y tiene que explicar qué ha estado haciendo", advirtió la concejala del PNV Jone Zamarbide, quien tampoco va a consentir que el PP "pase de puntillas" en la comparecencia del alcalde. Además, la formación nacionalista está muy preocupada por "el dineral" que, según dice, conllevará el mantenimiento de las cubiertas de Mendizorroza.
Para el portavoz de EB, José Navas, es un "escándalo" el sobrecoste, que no se detectaran las carencias al aprobarse el proyecto, que se volvieran a dejar elementos fuera incluso tras reajustarlo pasando el filtro de Urbanismo y la "falta de claridad" del PSE. Por su parte, el edil de EA, Antxon Belakortu, insistió en la necesidad de realizar la auditoría que tantas veces se le ha solicitado a Lazcoz. "Los gasteiztarras necesitan explicaciones de la razón del desfase, más aún cuando el equipamiento de ambas instalaciones ha disminuido en la misma medida que han aumentado los gastos", criticó.