Vitoria. La recogida neumática del Casco Medieval se ha manchado. Con información. El sistema ha dado un nuevo paso para combatir el mal uso y los buzones ya lucen carteles en los que detallan cómo deben utilizarse las bocas, qué materiales pueden depositarse y cuáles no. La colocación de estos paneles, atornillados en la base de los dos dispositivos, era una de las peticiones de los vecinos de la zona, que han demandado con insistencia más facilidades para emplear de la forma adecuada este método de recogida de basuras.
Habitantes de los barrios que ya disponen de la recogida neumática, como Ibaiondo, Zabalgana, Salburua, Mariturri y el propio Casco Antiguo, denunciaron recientemente la falta de concienciación en el uso de los buzones. Ya sea porque se necesita más información por parte del Ayuntamiento de Vitoria o porque los ciudadanos obvian las continuas campañas explicativas, lo cierto es que las bolsas de basura continúan apareciendo en la calle. Eso es precisamente lo que se quería evitar con estos buzones. Los grandes beneficios de la recogida neumática están en la limpieza de la vía pública y la mayor facilidad para depositar la basura a cualquier hora, pero está claro que, mientras las bolsas continúen poblando los alrededores de los buzones, algo falla. Porque Vitoria no aprovecha los beneficios de un nuevo sistema y sufre los inconvenientes del antiguo.
Desde el Departamento municipal de Medio Ambiente admiten que los quebraderos de cabeza más insistentes al hablar de recogida neumática -además del nuevo debate sobre si el sistema, por su coste económico y su ocupación de suelo, es sostenible, una reflexión que se abordará el próximo año- es el mal uso de los buzones, ya sea porque obligan a mantener la recogida de las bolsas que aparecen fuera, ya sea porque se depositan materiales prohibidos. Como el vidrio, los plásticos que no son envases -error común en el buzón amarillo-, vajilla, pilas... Incluso han llegado a aparecer residuos de la construcción.
las sugerencias vecinales Esta situación contrasta con una de las quejas más habituales de los vecinos del Casco: que las bocas de los buzones son demasiado pequeñas. Desde el Ayuntamiento, con la boca pequeña, se preguntan mientras qué aparecería en las plantas de recogida si fueran de mayor tamaño. No es el único problema. Las asociaciones vecinales, en el consejo territorial de Aldabe celebrado a finales del pasado mes de octubre, ofrecieron un rosario de propuestas: Gasteiz Txiki lamentó precisamente el tamaño de las bocas, Ladera Oeste no vio claro cómo debe usarse concretamente el buzón amarillo, Arquillos Bizirik lamentó la pasividad de los informadores que se reparten por el barrio durante las campañas publicitarias, Acoszapa pidió que se recordara a los hosteleros que pueden disponer de una llave para emplear su buzón específico y, finalmente, Barrenkale apostó por que se colocaran elementos informativos directamente en los buzones y no sólo se enviaran folletos a las casas o se explicara el funcionamiento del sistema en carpas habilitadas para la ocasión. Medio Ambiente se comprometió a hacerlo, aunque no facilitó plazos.
Esa medida se ha aplicado finalmente ahora. Los buzones del Casco Medieval ya lucen dos tipos de carteles informativos: uno en el que se explica por pasos cómo emplear las puertas y otros donde se ponen nombre y apellidos a cada buzón, para saber qué se puede depositar y qué no. A diferencia de otros barrios de la ciudad, donde se han pintado las puertas para facilitar esta identificación, en la almendra medieval únicamente hay una pincelada amarilla y otra verde -que en ocasiones ya se ha desconchado- en cada boca para así preservar la imagen del barrio.
Este manual de instrucciones directo sobre los buzones complementa el folleto que se buzoneó en el Casco, como parte de la nueva campaña informativa. Otro paso para facilitar el buen empleo de unos buzones de etiqueta.