vitoria. La accesibilidad de la futura estación intermodal se puso a prueba ayer en Vitoria. El Ayuntamiento convocó a casi una veintena de entidades a la casa de las asociaciones Simone de Beauvoir para, entre otras cuestiones, conocieran de la mano del equipo redactor del proyecto de Arriaga los detalles del recinto. La presentación generó dudas, pero el Ayuntamiento también propuso una forma de solventarlas: crear un grupo de trabajo en torno a la accesibilidad en las estaciones.
Esta reunión tuvo lugar durante la tarde de ayer durante un nuevo consejo municipal de Accesibilidad. La principal novedad que acogió el foro fue la presencia de un portavoz del equipo redactor de la intermodal -además, también hubo representantes de la sociedad urbanística municipal Ensanche 21-, que explicó a los presentes el proyecto de estación de autobuses e intermodal. Un total de 16 asociaciones estaban convocadas a la cita, como Eginaren Eginez, Itxaropena, Apdema, Afades, Aspace o la Once.
Una de las cuestiones que suscitó más preguntas fue cómo se solventará la conexión entre la estación de autobuses y la de Renfe. Integrantes de las asociaciones también lamentaron la presencia de postes en medio de algunas dársenas y cuestionaron ciertas distancias del proyecto de la terminal. Colectivos como Eginaren Eginez ya han manifestado en anteriores ocasiones que estas cuestiones pueden parecer mínimas, pero resultan claves para personas con discapacidad y, al final, todos los usuarios resultan beneficiados de que se cumpla la ley. A este respecto, el Consistorio propuso la creación de un grupo de trabajo. Fuentes presentes en la reunión lamentaron, no obstante, que sea necesaria la creación de un organismo así para vigilar que se cumple la normativa.
