vitoria. El balcón con las mejores vistas a los humedales de Salburua se llama Ataria. Y los gasteiztarras lo saben bien. De junio de 2009, mes de la inauguración, a diciembre contabilizó alrededor de 40.000 visitas, y desde enero ya ha sumado 58.036. Así que, si sigue al mismo ritmo, todo indica que el centro de interpretación de la naturaleza finalizará este ejercicio con una marca récord.
De momento, el mes de más trajín para Ataria ha sido el de la primavera, el que llena de vida los humedales: abril. Registró la espectacular cifra de 12.881 visitas, gracias sobre todo a las actividades protagonizadas por escolares. Le siguen en la lista mayo, con 8.646 usos; marzo, con 8.463; y junio, con 7.514. ¿Y en última posición? Agosto, claro. Con las vacaciones, el centro de interpretación de la naturaleza se encuentra a medio gas, con apenas 3.200 visitas registradas desde el pasado día 1.
Con el inicio del curso escolar, Ataria regresará con fuerza, a través de sus exposiciones y su programa. Destacan las actividades destinadas a la familia, así como los recorridos paisajísticos y las visitas guiadas a los parques y equipamientos del Anillo Verde, que se han convertido ya en un reclamo fundamental para los ciudadanos que se acercan al centro. No obstante, hay un sinfín más de opciones para que la gente descubra -o redescubra- desde el centro la que es una de las principales señas de identidad de la capital alavesa.
Prueba de ello es que los humedales de Salburua forman parte de la lista de puntos fuertes con los que Vitoria compite por el premio a la Capital Verde Europea. Además, se han erigido en el campo de acción de un novedoso proyecto denominado Birding Euskadi. La Agencia vasca de Turismo, Basquetour, y el Centro de Estudios Ambientales están colaborando en la apuesta en marcha de esta iniciativa, que tiene como objetivo principal impulsar la creación de un turismo de naturaleza aprovechando la creciente afición al avistamiento de aves y el valor ornitológico de esta zona.
El parque de Salburua constituye uno de los humedales continentales más relevantes de su entorno geográfico. Su importancia trasciende el ámbito local o regional, de manera que ha sido incluido entre los humedales de Importancia Internacional del Convenio Ramsar en el año 2002 y, más recientemente, ha sido propuesto para formar parte de la Red Natura 2000.