- Si las previsiones que los convocantes han realizado se confirman, en torno a un millar de titulares de administraciones de loterías y los mixtos se concentrarán el día 22 de septiembre en la madrileña calle de Alcalá, frente al ministerio de Hacienda, reclamando unas mejoras para el sector que se están demorando en el tiempo, en concreto 17 años.

El coordinador de administraciones de Lotería de Euskadi, Txema Fuentes, lo tiene claro: a falta de otras vías para lograr recuperar la pérdida de poder adquisitivo de los profesionales del sector, solo queda el camino de las movilizaciones. Primero en Madrid y, después, se estudiarán otra formas de protesta, que pueden pasar por acciones como la de “parar las máquinas expendedoras u otras cosas que se nos ocurran”. Porque, explica Fuente, en estos 17 años la comisión que cobran los loteros por la venta de décimos ha permanecido inalterable, 0,80 céntimos por décimo de 20 euros.

“Toda ha subido en estos años, los alquileres, los salarios y nosotros hemos perdido un 32% de poder adquisitivo”, subraya Fuentes que cree que la situación “ha pasado de castaño a oscuro”.

Al hecho del no incremento de las comisiones hay que sumarle otra realidad, el descenso de la ventas de décimos de un 40% por motivos diversos, como la venta online o la intromisión en la comercialización de décimos de no profesionales.

En Madrid unirán sus voces las administraciones de loterías “y los mixtos”, negocios en los que la venta de décimos se compagina con otras actividades, como bares o comercios.

“Estos 17 años hemos tratado de negociar sin conseguir nada y estamos fuera de mercado. Hay que vender muchísimo para sacar algo”, subraya el representante de las administraciones vascas. La situación ha derivado, lamentó, “en la venta de numerosas administraciones de lotería”. Y es que, destaca, cada vez que se trata de lograr mejoras con Hacienda, “siempre tenemos que oír que poco se puede hacer porque se aproxima un cambio de Gobierno. Y así va pasando el tiempo”.

“Estamos en la cuerda floja. No sé qué empresa puede aguantar con los mismos sueldos que en 2004. Es una situación que sigue empeorando cada año que pasa”, declara Fuentes.