- Una ola de frío con mínimas históricas, que llegaron ayer en algunos puntos del interior hasta los 25 grados bajo cero, complica y lo seguirá haciendo en los próximos días, la recuperación de la normalidad tras las intensas nevadas que dejó la borrasca Filomena.

La pasada madrugada fue una de las más gélidas de la que se tienen registros, en especial en algunas zonas del interior como el llamado “triángulo del frío”, entre las provincias de Teruel y Guadalajara.

La localidad turolense de Bello marcó en la madrugada de ayer la temperatura más fría de España, con -25,4 grados a las 04.30 de la madrugada, mientras que en el municipio de Molina de Aragón (Guadalajara) se vivió la noche más fría desde 1963, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), con mínimas de -25,2 grados.

Esta situación de frío intenso se produce gracias al anticiclón ubicado sobre España y que está registrando cielos despejados y viento en calma a pesar de que la borrasca Filomena se haya alejado hacia el este.

Las temperaturas siguen registrando valores muy bajos incluso en las horas centrales del día y las heladas contribuyen a convertir en hielo la nieve que aún está en el suelo tras el paso de la borrasca.

Estos registros son excepcionalmente bajos, aunque no constituyen récords absolutos. Atendiendo a la series históricas de Aemet, las localidades turolenses de Calamocha y Fuentesclaras poseen el récord de temperatura mínima más baja en un lugar habitado en España, el 17 de diciembre de 1963 con 30 grados bajo cero.

Las temperaturas mínimas registradas la pasada madrugada se encuentran entre el 5% más bajas del periodo de referencia, según el portavoz de la Aemet, Rubén del Campo, quien señaló que “es muy poco habitual” que en una extensión tan grande se den temperaturas tan extremadamente bajas.

Madrid, por ejemplo, vivió su jornada más fría en cuatro décadas, con -7,3 grados recogidos en el Parque del Retiro, solo comparable a otro valor similar registrado en 1981, mientras que en la localidad de Arganda del Rey, a las 07.30 horas el mercurio marcaba -15,8 grados.

Además, ocho estaciones ubicadas en capitales de provincia han bajado de los 10 grados bajo cero: junto a Toledo, Teruel y alrededores de Madrid, las de Ávila, Cuenca, Albacete, Salamanca y Guadalajara.

Del Campo señala que cuando la nieve de día recibe la luz del sol refleja la totalidad de esta luz y no absorbe casi nada del calor, y eso hace que durante la noche el enfriamiento del suelo sea “muy, muy intenso”.

La ola de frío que se está registrando en España continuará todavía en la jornada de hoy, con temperaturas mínimas inferiores a los diez grados bajo cero y heladas generalizadas en amplias zonas del interior peninsular, especialmente fuertes en el este del valle del Tajo y en zonas de La Mancha.

Las temperaturas aumentarán en el interior peninsular, especialmente las mínimas en zonas del centro y este, aunque se mantendrán anormalmente bajas para la época, especialmente en Madrid y Castilla-La Mancha.

Se producirán heladas generalizadas en el interior peninsular, excepto en el valle del Ebro y, aunque menos intensas que el día anterior, las bajísimas temperaturas aún estarán instaladas varios días hasta que comience a retirarse la masa de aire frío.

5%

Las temperaturas mínimas registradas en la madrugada de ayer se encuentran entre el 5% de los datos más bajos desde que se tienen registros.

El portavoz de la Aemet explica que durante el día, cuando la nieve recibe la luz del sol, esta refleja la totalidad de esta luz y no absorbe casi nada del calor, y eso hace que por la noche el enfriamiento del suelo sea “muy, muy intenso”.