"Hay más posibilidades de que te caiga un rayo a que te toque la Lotería". Esta frase es tan popular como cierta; de hecho, según expertos, la probabilidad de que te fulmine un rayo es de 1 entre 3 millones, que contrasta con las posibilidades de que te toque el Gordo de Navidad, 1 entre 31 millones o las del Euromillón, 1 entre 139 millones. Pero muchas veces la fortuna es tan caprichosa como bondadosa, y millones de personas se dejan hechizar por la esperanza y apuestan por los juegos de azar para hacerse con premios millonarios.
Los factores que influyen en la probabilidad de los juegos de azar son numerosos: desde la cantidad de personas que juegan y los números que se reparten, hasta los métodos y mecanismos del propio juego.
La Lotería del Niño, por ejemplo, es el sorteo extraordinario con la probabilidad más elevada: 37,92%. Esto se debe a la alta cantidad de premios que oferta, 37.920, a diferencia de los 15.300 que se reparten en Navidad. Sin embargo, los premios de este último son claramente más apetitosos.
Respecto a los sorteos ordinarios, el más "fácil" de que toque algo es la Lotería Nacional, con una probabilidad de 1 entre 100.000. Le siguen la Primitiva y Bonoloto, con 1 entre 13 millones, el Gordo de la Primitiva, con 1 entre 31 millones y, finalmente, el Euromillón, con posibilidades de 1 entre 139 millones.
Obviamente quedan excluidas las apuestas deportivas como la Hípica Nacional o Quinigol, donde poseer conocimientos sobre la competición en cuestión puede ser determinante a la hora de apostar.