El Frente Polisario acusó hoy a Marruecos de violar el acuerdo de alto el fuego firmado en 1991 y anunció que sus fuerzas respondieron a una agresión marroquí en el paso fronterizo de Guerguerat, bloqueado desde hace casi un mes por cientos de saharauis que exigen la retirada de las tropas de Rabat, y dijo que su Ejército sopesa considerarlo definitivamente roto.
En un comunicado enviado a Efe en Rabuni, la ciudad administrativa de los campamentos, el Polisario aseguró que "el Ejército marroquí ha abierto tres brechas y traspasado del muro" de separación construido en el desierto, considerado el más largo del mundo. Las fuerzas del Frente Polisario han intervenido para proteger a los ciudadanos saharauis que se encuentran desde hace tres semanas en Guerguerat para protestar contra la inacción de la ONU y la (misión espacial para el referéndum del Sahara Occidental) MINURSO. Las fuerzas del Ejército Popular de Liberación saharaui respondieron como es debido al ataque", agregó la nota sin otros detalles.
"Desde primera hora de la mañana, el Ejército saharaui estaba en alerta por los movimientos que ocurrían en la zona. Cuando estaban saliendo los marroquíes, el Ejército saharaui tuvo que intervenir rápido. Hizo un disparo táctico para tener tiempo y hacer retroceder a los marroquíes mientras se evacuaba a los civiles", explicó a Efe una fuente saharaui."Hasta el momento, todos los civiles están bien y ahora hay una reunión de los altos mandos del Ejército para decidir si se ha roto la tregua, como consideran algunos de ellos", agregó.PROSIGUEN LOS COMBATES
En este sentido, la fuente, próxima al gobierno saharaui, insiste en que "se libran combates en la zona" de Guerguerat, una estrecha franja de terreno que une la frontera de Mauritania con los territorios ocupados por Marruecos desde 1975 en la antigua colonia española del Sáhara Occidnetal.
El Ejército marroquí confirmó, por su parte, que sus fuerzas habían traspasado la línea divisoria y penetrado en la llamada "franja desmilitarizada del extremo sur del Sáhara" con el objetivo declarado de romper el bloqueo al tráfico impuesto hace tres semanas por un grupo de manifestantes saharauis. En la operación hubo disparos al aire tanto de parte saharaui como marroquí, según confirmaron a Efe fuentes marroquíes, que insistieron en que fueron disparos de advertencia y sin apuntar a personas, por lo que no hay que lamentar víctimas.
En un comunicado emitido esta mañana, las Fuerzas Armadas Reales (FAR) de Marruecos argumentaron que se trata de un "cordón de seguridad para garantizar el flujo de bienes y personas", y que la considera una acción de naturaleza "no ofensiva y sin intención belicosa (porque) "no habrá recurso a las armas salvo en caso de legítima defensa".
Fuentes oficiales marroquíes dijeron a Efe que Marruecos trata con esto de "terminar definitivamente" con los problemas en Guerguerat que se arrastran desde hace cuatro años, de acuerdo con la "determinación y la intransigencia" mostrada por el rey Mohamed VI en su último discurso del pasado 6 de noviembre.
CUATRO SEMANAS DE TENSIÓN
La tensión en el región de Guerguerat, que permite a los saharauis asomarse al Atlántico, ha crecido de forma exponencial desde que hace cuatro semanas un numeroso grupo de personas atravesara el desierto desde los campos de refugiados en la región argelina de Tinduf y las llamadas "zonas liberadas" y acamparan en el territorio ocupado de Guerguerat.
Los congregados anunciaron que permanecerían allí y solo permitirían el paso a civiles, por razones humanitarias, hasta las tropas marroquíes se retirasen y la ONU cumpliera con su compromiso de convocar un referéndum de autodeterminación para resolver uno de los escasos conflictos territoriales que quedan abiertos de la época colonial europea.
Días atrás, los manifestantes denunciaron que el Ejército marroquí y agentes de paisano se habían colocado a apenas tres kilómetros de su campamento y el Polisario puso a sus tropas "en estado de máxima alerta" antes de advertir que considera la tregua de 1991 "un armisticio temporal" sujeto a la celebración de la consulta entonces aceptada.