SEA Empresas Alavesas ha hecho pública una nueva entrega de su Barómetro de Coyuntura Económica Empresarial, correspondiente a marzo. Una fotografía de situación del tejido empresarial alavés en la que se constata que la situación de las ventas de las empresas del territorio se mantienen estables respecto al año pasado, si bien se incrementan 19 puntos las firmas que declaran que sus ventas al mercado español son inferiores, hasta el 37%. Las exportaciones también han empeorado para un 25% de las compañías, cinco puntos más que en la anterior entrega del Barómetro, en septiembre pasado.

Entre las 175 empresas del territorio que han participado en la elaboración de este Barómetro del primer trimestre del año, el 57% considera que la situación de su mercado en la actualidad es de normalidad, mientras que un 25% estima que la situación es de recesión –en los mismos parámetros que en la anterior entrega de este estudio– y un 18%, de reactivación –13 puntos menos–. 

Las empresas alavesas vienen de un 2023 en el que un 78% registró resultados mejores o similares a los de 2022, diez puntos más que en la anterior referencia.

La perspectiva para los próximos meses es ligeramente más optimista y un 25% prevé una ligera reactivación de su mercado, aunque también se incrementa levemente, al 23%, las que esperan una ligera recesión. Este contexto se refleja en que las empresas del territorio que declaran presentar carteras de pedidos altas disminuye seis puntos, al 19%, mientras que un 39% valora que es normal.

Llama la atención ese estancamiento que detectan las empresas del territorio del mercado interior, con un 37% de las firmas cuyas ventas son inferiores a las de hace un año, 19 puntos más que en la anterior entrega del Barómetro. Menos llamativo, pero también evidenciado, es ese dato en el caso de las exportaciones: el 25% detecta ventas inferiores al exterior, cinco puntos más. Y es que solo una de cada cuatro empresas declara que sus ventas al mercado interno son superiores, cuando los datos de septiembre eran 14 puntos superiores.

“Cambio” en las preocupaciones

Por otra parte, SEA Empresas Alavesas constata un “cambio” en el último semestre en el listado de preocupaciones de las empresas, situando al frente los costes laborales –aumenta nueve puntos, hasta el 72%– y las dificultades para contratar profesionales cualificados (66%), seguidos por la debilidad de la economía (51%). Disminuye seis puntos la preocupación por los precios de compra de las materias primas (46%) y por los precios energéticos –del 36% al 22%–.

“No sorprende este vuelco en las demandas empresariales cuando desde hace tiempo la captación y retención de talento se ha convertido en un verdadero reto para Álava donde, además, se registran índices desconocidos hasta ahora de ausencias laborales por bajas médicas, con un indeseable récord de 10.000 trabajadores al día”, sostiene la patronal alavesa.

Demandas del tejido empresarial alavés

Entre las demandas del tejido empresarial alavés a las administraciones públicas, vuelve a ser la más reiterada la reducción de la fiscalidad empresarial, que se dispara al 80%, once puntos más que hace seis meses. “Las empresas del territorio alavés cierran filas en torno a una llamada uniforme a las administraciones públicas para demandar una reducción de la fiscalidad –sostiene SEA–. Los encuestados consideran determinante cambios normativos en esta materia para poder competir con garantías frente a las empresas de otras latitudes”.

Muy de lejos, le sigue la reclamación de recortar el gasto pública y limitar el déficit (49%), que se incrementa 19 puntos. La tercera petición del ranking es más programas de ayudas y subvenciones, que alcanza el 40%, siete puntos más. 

La bonificación de costes energéticos, por ejemplo, retrocede al 30%, once puntos menos. También desciende la demanda de facilitar el acceso a la financiación al crédito, que se queda en el 22%, ocho puntos menos que hace seis meses.