Los suplementos de bronceado prometen potenciar el moreno e incluso aumentar el tiempo de duración de ese color en la piel. Además aseguran protegerla de los daños del sol como el envejecimiento.
Este tipo de productos no son tan molestos para las personas mientras están expuestas al sol. Pero, ¿merece la pena gastarse unos 30 euros en estos milagrosos suplementos?
Si se analiza la composición de estos productos, se puede encontrar que están hechos en su mayoría con betacarotenos. Estos no sólo son precursores de la vitamina A sino que también tiñen la epidermis desde dentro.
La piel se tiñe en un tono naranja, y en si esto no es malo para el cuerpo ya que en cierta medida es una protección que reduce ligeramente el riesgo de sufrir quemaduras solares. A pesar de este dato, se conoce que este efecto es mínimo y no protege contra el cáncer.
Desde la Organización de Consumo y Usuarios (OCU) afirman que “muchos suplementos se aferran a esta propiedad de la vitamina E para sustentar su alegación antiedad o de frenar los signos del envejecimiento, relacionados como sabemos con las reacciones de oxidación. Estas pastillas no son una excepción”.
En algunas ocasiones, estos suplementos incluyen un ingrediente llamado L-tirosina. Este elemento no sirve para facilitar el bronceado, pero es un aminoácido que el organismo necesita para producir melanina.
La OCU indicó que los suplementos, en general, “no aportan ningún beneficio (salvo en estados especiales en que haya carencias, como embarazo, algunas enfermedades). Seguir una dieta sana y equilibrada proporciona los nutrientes necesarios”.
Por su parte la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria publicó un artículo sobre los suplementos de bronceado. En él afirmaba que no hay una relación concreta causa-efecto entre el consumo de licopeno, vitamina E, luteína y selenio con la protección de la piel frente a los daños inducidos por los rayos UV.
Sin embargo, ese bonito color que adquiere la piel cuando se quema por los rayos solares no es para nada saludable. Aún así es común que las personas hagan todo por conseguirlo. Es por eso que la mejor manera de hacerlo es usar un buen protector solar y aplicarlo de manera frecuente y en cantidades no excesivas.
Otra clave para evitar los posibles daños adversos que provoca el sol, es evitar las horas en que las radiaciones solares son mayores y también no prolongar por mucho tiempo la práctica del bronceado.
Los expertos en salud aconsejan a las personas que no gasten el dinero en este tipo de productos. Aseguran que comer frutas y verduras, y mantenerse correctamente hidratado bebiendo agua durante todo el día es la mejor opción para conseguir el bronceado bonito.