El ayuno intermitente es "un método de dieta que no solo ayuda a controlar el peso y mejorar la salud, una forma de alimentación que nos hace conscientes del funcionamiento y de las necesidades de nuestro cuerpo, sino sobre todo es una práctica de autoconocimiento", señala Endika Montiel, técnico superior de Nutrición y autor de Ayuno consciente (Editorial Planeta). Tras años de aprendizaje, este exjugador de fútbol nacido y criado en Llodio (Araba) asesora en esta disciplina a deportistas de elite y a personas interesadas de todo el Estado español. Con su libro quiere enseñar a quienes lo deseen a interpretar las señales de su organismo para saber qué tipo de ayuno le conviene, cuáles son sus beneficios, cómo hacerlo sin perjuicio para su salud y qué ejercicios puede practicar para ir midiendo las reacciones del cuerpo.

¿El ayuno va más allá de consumir menos calorías para perder peso?

Sí. Su práctica ayuda a quien lo practica a conocerse mejor y a fortalecer su cuerpo y su mente. Es un método seguro que puede adaptarse a cada persona y formar parte de su estilo de vida.

¿Cuándo empiezas a notar los beneficios de este método?

Tras las primeras doce horas de ayuno. Te ayuda a ser más consciente de las sensaciones que experimentas cuando no hay comida en tu intestino y a ser capaz de identificar cuándo el hambre que sientes es real o fruto de tus emociones. Aunque hay diversos tipos de ayuno, esta práctica debe ser personalizada, y el mejor será el que mejor se adapte a ti.

Ya se sabe que el ayuno consiste en abstenerse de ingerir alimentos de manera voluntaria durante un periodo determinado de tiempo. Pero, ¿qué es exactamente el ayuno consciente?

Consiste en la práctica de cualquier ayuno porque eres consciente de los numerosos beneficios que aporta a tu salud. El ayuno permite reconciliarte con la comida, que cuides tu microbiota intestinal, mejores tu rendimiento deportivo y aumentes tu productividad. Asimismo, potencias tu cognición, además de que te ayuda a evitar comer si no es necesario y a saber identificar cuáles son aquellos alimentos que no le sientan bien a tu cuerpo.

¿Lo dice por propia experiencia?

Sí. Llegué al ayuno consciente por problemas de salud: me recetaban medicamentos y me derivaban a distintos especialistas pero no encontraban lo que me sucedía, hasta que cambié mi forma de alimentación y encontré solución a mis problemas. Esta práctica me permitió conocer mejor cómo funciona mi cuerpo, conectar con las sensaciones de mi interior y ser más consciente de la importancia de la salud para experimentar bienestar y plenitud.

¿Es la dieta de moda?

Es tendencia porque algunas famosas se han apuntado a ella y lo han hecho público, y aunque la han expuesto como método exclusivo para la pérdida de grasa, eso es solo una consecuencia. La finalidad última es la salud, y quien la haga se encontrará más equilibrado. Creo que utilizarla solo para perder grasa es simplificarla mucho, porque apenas es una pequeña parte de los grandes beneficios que nos aporta. Hay un exceso de información, protocolos y mitos nutricionales que hacen de su práctica algo más complicado de lo que parece.

¿Hay distintos métodos de ayuno?

Sí, y los dividiría en intermitentes, largos y prolongados. Las opciones dependerán de cada persona, pero muchas que empiezan por el ayuno de doce horas luego se van enganchando hasta llegar a incorporar esta práctica en su vida prolongadamente.

¿Habría que introducirse en esta dieta con el apoyo de un especialista?

Sería lo ideal, porque cada cual es un mundo, por eso es importante consultar con el médico o profesional de la salud, para conseguir tus objetivos con todas las garantías. No se trata de seguir las pautas que te marcan las influencers porque pueden dañarte la salud. Todo hay que hacerlo con cabeza y así conseguir mayor bienestar y mejorar tu calidad de vida. Por muy beneficioso que sea el ayuno, mal gestionado puede resultar altamente contraproducente.

¿Una alimentación equilibrada, actividad física y unos hábitos saludables no serían la mejor opción para nuestra salud?

Efectivamente, nada sustituye a todo eso y reconozco que el ayuno no es mágico, ni milagroso, ni el santo grial, pero mi experiencia personal sí me ha demostrado que es eficaz como práctica de autoconocimiento.

¿La evidencia científica avala este método?

El ayuno se usaba en la Antigüedad como método curativo para sanar enfermos, como estrategia medicinal para desintoxicar el cuerpo y como práctica espiritual para conectar con el yo interior. La evidencia científica respalda sus múltiples beneficios con marcadores específicos que se logran con él.

¿Cómo cuáles?

Desde reducir los marcadores inflamatorios, regenerar la microbiota, fortalecer el sistema inmunitario y prevenir enfermedades degenerativas debidas al estrés oxidativo, hasta reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares e incluso tratar la depresión. La restricción calórica y el ayuno intermitente también han demostrado reducir el riesgo de accidente cerebrovascular, pérdida neuronal y los trastornos neurodegenerativos, como la demencia, el Alzheimer, la enfermedad de Huntington y el Parkinson.

¿Existe una relación entre el aparato digestivo y nuestro estado de salud?

Sí, a través del eje microbiota-intestino-cerebro. El intestino tiene su propio reloj periférico circadiano, es decir, se puede programar según los patrones de alimentación que conforman tus hábitos de vida. Por ejemplo, el hambre matutina es más una costumbre que un hambre real.

¿Entonces, para qué desayunar?

El cuerpo está diseñado naturalmente para ayunar; a veces comemos sin necesidad, sin que el cuerpo nos lo pida. Hay que entender que no somos robots y que las calorías no son lo más importante.

Y la última comida del día hay que hacerla unas tres o cuatro horas antes de ir a la cama, ¿no?

Exacto, de ese modo el cuerpo tendrá el tiempo necesario para realizar los procesos correspondientes (digestión y almacenaje de nutrientes) y que estos no interfieran en los biorritmos.

La industria alimentaria mueve muchos millones de dólares y tiene unos intereses muy concretos...

Sí, y genera en la población unas necesidades alimenticias innecesarias. Nos animan a consumir productos nada saludables, con muchas grasas trans, de ahí que el Estado español sea uno de los países del mundo con una tasa de obesidad y sobrepeso infantil más importantes del mundo, y en un país con una dieta mediterránea, esto es monstruoso. La industria, además, suele realizar estudios sobre distintos alimentos en los que oculta la verdad. Suelen ser trabajos avalados por algunos expertos que se enriquecen con ellos.

¿Su libro es la guía más completa sobre el ayuno y cómo ponerlo en práctica?

La publicación se enfoca hacia brindar al lector información que le permita tener una noción real sobre lo que sucede en su interior y cómo se manifiesta en el exterior, para que de esta manera adquiera la conciencia y el control sobre sí mismo. Porque la práctica del ayuno, al igual que cualquier otra estrategia nutricional, debe ser personalizada e individualizada, no hay un protocolo mejor que los demás. Quién siga el ayuno intermitente no debe mortificarse pensando en qué consumir durante el estado de ayuno para no romperlo, o si es mejor entrenar en ayunas o no. Todo esto dependerá de su contexto y sus sensaciones.

Personal

  • Lugar y fecha de nacimiento: Llodio (Araba), 1989.
  • Formación: Es técnico superior en Nutrición, campeón de Mr. Olympia Europa y exfutbolista.
  • Trayectoria: Comenzó en el fútbol cuando tenía solo 15 años. Luego comenzó a ir al gimnasio cuatro veces a la semana y a enfocarse en su condición física. Cuando cumplió 22 años decidió practicar el fisioculturismo e insistir en el acondicionamiento físico.
  • Actividad actual: Actualmente se dedica a asesorar y brindar coaching a personas conscientes de la importancia de la salud para alcanzar objetivos de mejora, tanto en la estética corporal como en la calidad de vida. Es especialista en la optimización del rendimiento deportivo con futbolistas de élite como Javi Martínez y deportistas en general, con los que trabaja áreas propias de la nutrición. Tiene consultas abiertas en Bilbao y Miami, y participa a menudo como ponente en múltiples seminarios sobre nutrición, fitness o fisioculturismo.