Cuando en el colegio hacía espectáculos de fin de curso, por su cabeza ya pasaba la idea de salir en la tele y, a medida que fue tomando parte en más eventos de ese tipo, fue sabiendo que “lo que realmente me gustaban eran los escenarios”. Por eso, en cuanto supo que en Vitoria-Gasteiz había una escuela de teatro, no dudó en apuntarse y compaginarlo con sus estudios de la ESO, Bachiller e Integración Social y decantarse por formarse como profesional en Bilbao arrinconando aquella idea de estudiar Periodismo que alguna vez pasó por su cabeza.