1 Vocación jardinera. Siempre pensó que su vida profesional estaría al aire libre, diseñando paisajes. Estudió Paisajismo en Londres porque su afición era recorrer jardines y estudiar todas las posibilidades que tienen.
2 Cocinera por casualidad. Una apuesta con el propietario del restaurante Horcher de Madrid le llevó a las cocinas de ese establecimiento. La apuesta iba sobre el tiempo que Samantha aguantaría en una cocina. Ganó: lleva más de 30 años.
3 Pelar gambas. Le pareció una actividad fascinante, igual que pelar alcachofas y otros productos. Desde el minuto uno se olvidó de las flores y los paisajes y se centró en los fogones. Hoy, tiene una empresa de catering y recientemente ha visto cumplido su sueño de abrir restaurante en Segovia.
4 Familia de cocinillas. No se aburrió durante el confinamiento, cuando toda la familia se puso a cocinar. En su casa todos se meten en harina cuando se está frente a un fogón. Y cuando se reúne la familia al completo pueden ser hasta 22 personas.
5 Un gato en redes sociales. Su mascota se llama Chef y está muy integrada en la familia. La televisiva cocinera dice que el gato es uno más en casa y todos le adoran. Además, está muy conectado porque tiene cuenta propia en Instagram: @chefmasterkat.
6 Una casa divertida. A la familia Aznar-Vallejo-Nágera le encanta disfrazarse, cantar, bailar, llenar la vida de color, música y alegría con cada detalle. Si ella y su marido tienen tiempo libre, lo destinan a montar fiestas de familia y de amigos.
7 Una mujer muy ocupada. Se reconoce como una persona muy inquieta, y su entorno lo confirma. Ha escrito varios libros, es madre de cuatro hijos, tiene dos negocios dedicados a la cocina y tres programas de MasterChef en La 1. Además, hace deporte y le gusta perderse en largos paseos.
8 Solidaria. Uno de sus cuatro hijos tiene síndrome de Down, y siempre ha hecho de esta circunstancia una bandera que pueda servir para lograr una mayor integración social. Su hijo está siempre muy presente en su entrevistas y en sus acciones.
9 'Au pair' en Londres. Se ha movido en muchos campos, pero pocos saben que fue au pair en Inglaterra, en casa del guionista y cineasta Mark Peploe. Le ofrecieron hacer una cena para unos amigos y allí descubrió que podía ganarse la vida cocinando.
10 Un menú de boda muy particular. Cuando conoció a su marido, Peru Aznar, fue todo un flechazo. Se casaron seis meses después y recuerda con mucho sentido del humor que sus invitados se sorprendieron ante el menú. Eliminaron el marisco y los platos sofisticados y hubo lentejas, bocadillos y gazpacho.