madrid ? La serie original de Atresmedia Televisión, en colaboración con Vancouver Media, estrena su temporada final hoy a las 22.30 horas. Seis últimos capítulos llenos de giros argumentales, tensión y mucha acción que derivarán en un desenlace prometedor del mayor atraco de la historia. La producción ha sido un éxito de audiencia y crítica, además de recibir el premio a Mejor Ficción Nacional y a Mejor Dirección en el Festival de Televisión de Vitoria.

La Casa de Papel cuenta la historia del atraco a la Fábrica Nacional de la Moneda y Timbre, planeado por El Profesor y ejecutado por atracadores que ocultan su verdadera identidad bajo el nombre de diferentes ciudades del mundo. El atraco sucede durante 12 días, en los que toman a los propios trabajadores de la fábrica y a varios alumnos del Colegio Británico como rehenes.

En esta recta final, la policía cada vez está más cerca de capturar a los ladrones, lo que generará tensiones entre el grupo de atracadores. Además, llegarán nuevos personajes que modificarán los acontecimientos, como el ex de la inspectora Raquel. Aunque anteriormente ya apareció en la serie, en esta última temporada cobrará una especial importancia. La inspectora tendrá que trabajar mano a mano con él para poder capturar a el cerebro del mayor atraco de la historia.

Por otra parte, el grupo de atracadores comienza a desquebrajarse. Algunos de los miembros están malheridos, mientras que otros ven imposible dejar de lado las diferencias y seguir con el plan original. Esto se debe en gran medida a las decisiones de Berlín, que como responsable al mando ha llevado al límite la situación de la banda con su actitud autoritaria. En el ojo del huracán, la temperamental Tokio y el joven Río mantienen un romance de final incierto: Lo que le suceda a uno, podría afectar en gran medida al otro. La ausencia de noticias sobre El Profesor es otro de los factores que podría cambiar el curso de la historia. Los rehenes ya asestaron un golpe a la banda mediante un motín y, en la situación actual, podrían repetir la jugada a pesar de que algunos de ellos han aceptado dinero a cambio de colaborar. ? DNA