Dos chef vascos y uno mexicano, afincado en Madrid, todos con una estrella Michelin, serán los encargados de reinterpretar La última cena para el canal Historia. La primera entrega se emite hoy y el ágape bíblico en versión siglo XXI se va a alargar hasta el 6 de abril. El programa contará con la presencia del gastrónomo y bloguero Mikel López Iturriaga, quien será el interlocutor entre los espectadores y los cocineros. Él explicará el porqué de los platos elaborados y qué sensaciones le han producido.

Los reconocidos cocineros están dispuestos a mostrar a los espectadores un abanico de sabores que, seguramente, hubieran dejado sin habla a los comensales de la verdadera última cena. David García, Fernando Canales y Roberto Ruiz han presentado platos exquisitos siguiendo patrones de proximidad a la zona donde se celebró La última cena. Los tres chef han tenido que echar mano de la imaginación para elaborar un menú que tuviera algún punto en común con la celebración que estaban representando.

El gastrónomo y periodista Mikel López Iturriaga llevará la batuta de este exótico ágape. Él ha probado los platos que se muestran a partir de hoy, a las 21.55 horas, en el canal Historia. “Cada uno ha hecho una reinterpretación bastante libre de lo fue aquella cena. Han cogido de base ingredientes que se supone estuvieron presentes entonces: cordero o pescado de río. A partir de ahí, han dejado viajar mucho la imaginación”, señala López Iturriaga.

Además, apunta que es evidente que en esta última cena televisada, igual que ocurrió en las dos anteriores entregas, no se ha pretendido ser fiel a la historia: “Sería imposible porque no se sabe qué se tomó en la misma, ni siquiera sabemos si se celebró. Lo que han intentado los tres cocineros es utilizar ingredientes simbólicos de aquella época y llevarlos a la televisión del siglo XXI”.

Mikel López Iturriaga entabla en cada uno de los episodios de La última cena un diálogo con los tres cocineros en los que se explica cada plato y se revela por qué se han decidido por cada uno de los menús. “Mi labor es probar cada uno de los platos y comento las sensaciones que he sentido al degustarlos”. Explica que las sensaciones en general han sido muy agradables: “los tres son grandes cocineros; tengo que decir que unos platos me han gustado más que otros. El postre que hizo Roberto Ruiz estaba basado en la tradición. El beso de Judas y la sangre eran sus elementos imaginativos y tenía un sabor bastante ácido y amargo, era el más violento al paladar. Otras cosas que hicieron me han parecido increíbles y fantásticas”.

Alaba la elaboración del cordero: “Los tres dominan perfectamente la técnica de esta carne. De Fernando Canales me sorprendieron los platos que presentó, me esperaba que fuera a intentar llevar la historia a la tradición de la cocina vasca y no lo hizo. Él acababa de estar en Líbano y elaboró un menú con muchísimas referencias a la cocina de Oriente Próximo. Hizo una codorniz desmigada envuelta en hoja de parra, que me recordó a las que se comen en Grecia o Turquía. El postre estuvo muy bueno. Una cena estupenda”.

López Iturriaga se ríe al suponer cualquiera de los tres menús en el relato bíblico de La última cena de Jesucristo: “No me imagino a los apóstoles utilizando los instrumentos de cocina que han usado David, Roberto y Fernando. Se supone que, de celebrarse, esta cena fue mucho más humilde y frugal que la que vamos a ver por el canal Historia”

Roberto Ruiz es propietario de Punto MX, único restaurante mexicano en Europa con una estrella Michelin. Su interpretación comienza con el pulque, bebida fermentada del México prehispánico, considerada la sangre del espíritu de la Tierra. Le sigue mextlapique de anguila y barbacoa; para finalizar con el postre llamado La traición.

David García se apoya en ingredientes que, según las investigaciones históricas, degustaron Jesús y los apóstoles: trucha ahumada, remolacha y ajo blanco de coco con su ensalada de pomelo; paletilla de cordero con jugo de cebolla roja. El menú termina con suflé de piña, muselina de lima, jengibre y crema helada de romero. Fernando Canales utiliza elementos que han tenido una gran importancia en la historia de la humanidad, como son las especias y en especial el sumak, originario de Palestina, que forma parte de su primer plato: Crema de frutos rojos con sumak. Finalizará con nidos de kadaif y jaroset, un postre compuesto de dátiles, pasas, vino, y manzana. Un menú divino.