Madrid. La Policía Nacional detuvo el pasado fin de semana en Madrid a una persona acusada de amenazar de muerte al periodista deportivo de Cuatro y de la cadena Cope Juanma Castaño y a su familia, según informaron fuentes de la investigación. Además hay otras tres personas imputadas por estos hechos.

La cuenta de Twitter de la Policía informó ayer de la detención de "un tuitero" y de la imputación de "otros 3 por amenazar de muerte a un prestigioso periodista deportivo vía Twitter". Las fuentes consultadas precisaron que el periodista es Juanma Castaño, quien presentó una denuncia por estos hechos el pasado mes de mayo ante la Policía. Tanto el detenido como los tres imputados son residentes en Madrid y entre otras cosas dedicaron comentarios al periodista como "vete preparando tu ataúd, mierda seca, voy a por ti y a por los tuyos". Según los investigadores, los cuatros tuiteros son amigos y se pusieron de acuerdo para "infundir temor" a su víctima como "forma de divertimento", debido a la animadversión que sienten por este periodista. La investigación ha corrido a cargo de la Brigada de Investigación Tecnológica (BIT) de la Policía Nacional, que ha logrado dar con la identidad y el paradero de los responsables de estas amenazas, precisaron las mismas fuentes.

No es la primera vez que la BIT de la Policía Nacional permite la detención de personas que aprovechan el anonimato de esta red social para amedrentar, insultar o amenazar gravemente a personalidades de los medios de comunicación. El pasado día 16, la Policía logró la detención en Marbella de otra persona que había usado este medio para acosar y amenazar a Eva Hache. En ese caso, también fue la propia humorista la que alertó a la Policía por medio de esta red social. En la su misma cuenta de Twitter, la Policía Nacional recuerda que "las amenazas graves, como otras formas de #ciberacoso demostrado, suponen un DELITO perseguido por la Ley". En concreto, según el artículo 169 del Código Penal una amenaza de este tipo puede acarrear entre uno y cinco años de cárcel en caso de que la amenaza sea condicionada o entre seis meses de cárcel y dos años en caso de que no sea condicionada.