Cuando se acerca la Navidad en Vitoria-Gasteiz y el resto de Álava, el mayor quebradero de cabeza suele ser siempre el mismo: ¿qué preparo este año? Para que no tengas que pasar horas comparando recetas, hemos reunido tres opciones de menús navideños, fáciles de adaptar y con un toque moderno que funciona muy bien en las mesas alavesas.

Tradición con capón

En un menú pensado para quienes buscan un ambiente festivo sin renunciar a los sabores clásicos, el primer plato toma forma a través de unos montaditos de patata y foie inspirados en la propuesta navideña de Karlos Arguiñano.

La idea consiste en combinar rodajas de patata cocida con pequeñas porciones de foie micuit y una fina capa de cebolla caramelizada.

El resultado es un entrante templado y fácil de preparar, con un equilibrio entre suavidad y untuosidad. Su baja dificultad permite que cualquier cocinero lo incorpore sin complicaciones.

Como plato principal, te proponemos el tradicional capón relleno. Calcula un ave de unos 4 kg (para diez personas) con un relleno de frutas secas como orejones, ciruelas, pasas y carne picada.

El relleno se mezcla con vino dulce y especias. El capón se hornea a baja temperatura durante varias horas, hidratando el ave cada 40 minutos. Esta cocción prolongada garantiza una carne tierna que absorbe los matices del relleno.

Capón al horno en una mesa navideña Pexels

Ligero y marinero

Si prefieres una cena menos contundente, este menú ofrece la combinación ideal entre frescura y técnicas sencillas.

Empezamos por una crema de marisco. A partir de un sofrito de puerro y tomate, incorporamos gambas o langostinos, un chorrito de brandy y un fumet de pescado que aporta profundidad.

Tras triturar y colar, se añade nata para ajustar la textura. Es un plato de dificultad media, perfecto para servir caliente y aportar calidez al menú.

Como segundo, el pescado al horno representa la versión moderna de un clásico. Según el presupuesto se puede elegir dorada, lubina o merluza.

Solo requiere un pescado fresco limpio, un chorro de vino blanco, rodajas de limón y hierbas aromáticas.

El horno permite que la carne quede jugosa sin apenas intervención, convirtiéndolo en un plato accesible tanto para cocineros experimentados como para quienes buscan una noche especial.

Menú vegetariano

Este menú responde a la demanda creciente de propuestas navideñas que prescinden de carne y pescado sin sacrificar interés gastronómico.

Como primer plato, una crema de verduras de temporada: hortalizas de invierno como calabaza, zanahoria o lombarda, con caldo vegetal y especias cálidas como jengibre o cúrcuma.

El resultado es una crema aromática, de dificultad baja, que aporta color y textura al menú.

El segundo continúa con una calabaza rellena, inspirada en la receta de El Comidista. Se asa la calabaza entera hasta que la pulpa esté tierna y pueda usarse como recipiente natural.

El relleno mezcla puerro, apio, zanahoria, arroz o bulgur y frutos secos triturados. Es un plato vistoso, de dificultad media, ideal para quienes quieren sorprender sin proteínas animales.

Turrones y figuritas de mazapán sobre una superficie de madera. Freepik

Postres para todos

Para cerrar la cena con un buen sabor de boca, vuelven los clásicos: turrones, polvorones y mazapanes.

Los turrones ya no se limitan al clásico duro o blando de almendra o al de chocolate crujiente. Las casas fabricantes también ofrecen sabores como chupachups, pistacho, cremas con yogur, yema con naranja e incluso versiones saladas o combinadas.

Los turrones artesanales tampoco se quedan atrás: sabores como leche de Oveja Latxa, Soconusco, Trufa Naranja, Yema Tostada o el Imperial.

A ellos se suman polvorones, mantecados, barquillos y otros dulces.

Para quienes buscan una alternativa vegana sin renunciar al sabor navideño, el mazapán vegano —elaborado solo con almendras molidas y sirope de agave— ofrece un resultado fiel al original. Mantiene el aroma de la almendra, pero prescinde de huevo y lácteos, convirtiéndolo en una opción accesible para todos.