Solaria es una empresa líder en el desarrollo y generación de energía solar fotovoltaica en el sur de Europa y tiene el objetivo de alcanzar 18 GW en 2030. En estos momentos el desarrollo rápido y masivo de energía solar fotovoltaica es fundamental. La subida de los precios de la electricidad provocada por el encarecimiento de los combustibles fósiles (coste del gas y de las emisiones de CO2) y la incertidumbre derivada de la situación geopolítica que se está viviendo en Europa, han demostrado que desarrollar localmente fuentes de energía renovable que no solo reducen la dependencia energética exterior, sino que también permiten rebajar el coste de la factura eléctrica, es necesario.
La tecnología solar fotovoltaica, además de renovable, es actualmente la fuente de generación de electricidad más barata. Al verter la energía de las plantas de Solaria en la red eléctrica, reducen el precio medio que se aplica a todos los consumidores por disminuir la cantidad de energía proveniente de fuentes más caras y más contaminantes, como el gas, lo cual redunda en el beneficio de la sociedad. Cuanta más fotovoltaica, menor coste para quien consume. Además, hoy en día, producir energía renovable y, en concreto, energía solar fotovoltaica es una necesidad ya que constituye una alternativa eficaz para paliar los efectos del cambio climático y favorece el acceso a una energía más limpia, verde, rentable, competitiva y disponible para toda la población.
En este contexto, desde la compañía energética están convencidos de que “Araba va a jugar un papel clave en la transición energética de Euskadi” y va a seguir siendo una de sus principales apuestas por un desarrollo sostenible. “Euskadi tiene un gran potencial para el desarrollo de energía solar fotovoltaica y, junto con el apoyo del territorio, queremos ser partícipes de este cambio”, señalan. En este sentido, en junio del año pasado, junto con el EVE, constituyeron Indarberri, “una nueva sociedad para desarrollar de forma conjunta proyectos de energía solar fotovoltaica, u otros proyectos de generación de energías renovables”. Los primeros proyectos que están desarrollando son “dos plantas fotovoltaicas de 50 MW en Araba, que generarán energía verde durante más de 30 años y que serán totalmente compatibles con el entorno, la fauna y la flora”. Su idea es que la energía que generen puedan venderla a las empresas del territorio a precios muy competitivos. Hoy en día ya tienen todos los terrenos y están a la espera de recibir las primeras autorizaciones administrativas. Tanto Solaria como el EVE tienen un objetivo común: ofrecer energía verde en Euskadi con el fin de sustituir las energías contaminantes por otras alternativas renovables y liderar la transición energética.
Instalaciones integradas en el entorno
En Solaria apuestan por una transición energética justa y respetuosa con el medioambiente. Por este motivo, desarrollan plantas fotovoltaicas integradas en el entorno y que mantienen la compatibilidad con otros usos tradicionales del terreno como la agricultura o la ganadería.
Con el objetivo de que este cambio de modelo energético sea rentable para todas las personas, desde la compañía consideran necesaria una reforma integral que acelere de manera ordenada y regulada la transición energética. “Es fundamental que la administración acelere la tramitación de los proyectos y que se reduzcan los escollos burocráticos” manifiestan. Cada proyecto que se conecta a la red ayuda a bajar el precio de la energía y reduce nuestra dependencia energética exterior. Actualmente, con la energía que genera Solaria, por cada MW conectado podría abastecer el consumo de aproximado de 550 hogares españoles, favoreciendo la reducción de la dependencia eléctrica y contribuyendo con la Agenda 2030 y el Pacto Verde Europeo.
Una compañía especializada
Uno de los mayores valores diferenciales de Solaria es su alto grado de especialización. Acumula décadas de experiencia y, desde su creación en el año 2002, ha participado en toda la cadena de valor de la actividad fotovoltaica con el compromiso de contribuir a un futuro mejor y al desarrollo sostenible de la sociedad. Su modelo de negocio ha ido evolucionando desde la fabricación de células y paneles fotovoltaicos hasta el desarrollo, gestión y explotación de plantas de generación.
En los últimos meses, Solaria ha alcanzado 2.786 MW en operación y construcción, consolidándose como líder fotovoltaico de la península ibérica. Además, la compañía ha alcanzado los 7,7 GW en puntos de conexión en España y Portugal. De esta forma, Solaria ya ha alcanzado la visibilidad total sobre 6,2 GW que responde a su objetivo para 2025.
El pasado mes de noviembre, Solaria obtuvo la máxima calificación en el rating ESG de Morgan Stanley Capital International (MSCI), pasando de una “A” a una “AAA” y situándose entre el Top 15 de las utilities. Con este logro, la compañía, que ha subido dos escalones, entra a formar parte del exclusivo grupo de valores que reciben un rating “AAA” en cuestiones ambientales, sociales y de buen gobierno corporativo.