¿Dónde se rompió la cadena de custodia? Es una pregunta que todavía no tiene respuesta. Según información a la que ha tenido acceso este diario en exclusiva, un juicio que se tenía que haber celebrado en el juzgado de lo penal de Bilbao en diciembre del año pasado tuvo que suspenderse.

El motivo, la desaparición de una de las pruebas de la defensa, un vídeo aportado para demostrar la agresión de tipo sexual sufrida por una mujer residente en Bizkaia en el año 2020. Una prueba clave para sostener la defensa de la mujer presuntamente agredida.

Se da la circunstancia de que el vídeo fue considerado por la Audiencia Provincial de Bizkaia como determinante para corroborar la denuncia de la mujer denunciante. Dicha denuncia fue sobreseída en un primer momento por el juzgado de instrucción número 7 de Bilbao. Interpuesto un recurso de apelación, desde la Audiencia Provincial de Bizkaia se revocó el sobreseimiento a fin de incoar un procedimiento penal por un delito contra la libertad sexual.

El vídeo fue considerado por la Audiencia Provincial de Bizkaia como determinante para corroborar la denuncia

“Existen diversos episodios en los que el investigado despliega actos de inequívoco contenido sexual, que no han sido consentidos por la denunciante, por lo que procede al sobreseimiento”, reza el auto de la Audiencia Provincial de Bizkaia al que ha tenido acceso este periódico.

Del mismo modo, la Audiencia Provincial de Bizkaia considera que la grabación de un audio de parte de la conversación aportada por la presunta víctima “corrobora, en cierta medida” la situación que se aprecia en el vídeo desaparecido de “sofoco, azoramiento y cierto acoso al que se ve sometida por parte del investigado”.

Expertos jurídicos que consideran “un escándalo” y una situación “insólita” la desaparición de una prueba bajo custodia judicial

Sin embargo, llega el día del juicio en diciembre y, al inicio del mismo, se determina su aplazamiento ante la constatación de que la prueba del vídeo ha desaparecido. Este diario ha consultado a expertos jurídicos que consideran “un escándalo” y una situación “insólita” la desaparición de una prueba bajo custodia judicial tanto por el hecho en sí, como por la indefensión que se ha generado para la presunta víctima.

“La desaparición de una prueba así es algo inadmisible”, señalan. Sobre la ruptura de la cadena de custodia, las mismas fuentes consultadas por este periódico coinciden en la gravedad de una circunstancia de estas características, “inédita”, coinciden los expertos consultados.

“Es un hecho insólito”

  • Cadena de custodia. Que una prueba custodiada en un juzgado como el de Bilbao desaparezca es un hecho no solo “grave” sino también “insólito”. La cadena de custodia comienza cuando se identifican las pruebas,. Las pruebas se identifican con un número de registro y para que no se rompa, se documenta cada fase por la que pasa la prueba con el lugar, las personas que la han analizado y dónde ha estado almacenada. En la Audiencia Provincial de Bizkaia, a la sala en la que se almacenan las pruebas para un juicio puede acceder el personal del juzgado “sin restricciones” y está controlado con un sistema de vídeo vigilancia. “La desaparición de una prueba es algo muy raro”, insisten. Sin intención de justificar lo ocurrido, las mismas fuentes plantean como hipótesis que la prueba pudiese haberse extraviado de “manera fortuita” en el momento de la instrucción. – S. Atutxa


“Algo muy raro”