El juez del caso de Helena Jubany --la joven que encontraron muerta en Sabadell (Barcelona) en diciembre del 2001-- ha retirado el pasaporte, ha prohibido salir de España y ha impuesto comparecencias periódicas en el juzgado al sospechoso, X. J. M., que se añadió a la causa el pasado mes de diciembre, poco antes de que prescribiera el crimen.
Se trata del responsable de los anónimos que recibió la joven antes de morir, tal y como lo ha identificado la investigación policial, y "la sustancial conexión" entre estos y el crimen, tal como se ha recogido en el auto para aplicar estas medidas, después que este viernes declarara en los juzgados de Sabadell, donde solo ha contestado a las preguntas de su abogado.
En el dictamen, ha justificado la existencia de una relación del acusado con Helena y que "ha manifestado que intentó un acercamiento con el objetivo de quedar ellos dos", pero que ella rechazó y a partir de entonces hubo un alejamiento, además de la vinculación de ambos con la Unión Excursionista de Sabadell, a la cual hacía referencia uno de los anónimos.
Nuevos análisis
La familia de Helena Jubany ha solicitado el análisis de la ropa de la joven "por las mejoras tecnológicas" que se han producido en estas dos décadas, ha explicado su abogado, Benet Salellas, a la salida de las dependencias judiciales.
El letrado ha dicho que "Policía Nacional se ve capacitada" para examinar la ropa y buscar restos biológicos y que en el caso de que el magistrado acepte y el resultado de las analíticas fuera positivo, es decir, no correspondiera con el ADN de Helena Jubany, se requerirían muestras voluntarias de Jiménez, y si no aceptara, obligarlo vía orden judicial a hacerlo.
En este sentido, Salellas ha destacado que este hipotético hallazgo supondría "un salto cualitativo en la investigación y sitúa, probablemente, en un contexto de juicio oral" y ha añadido que acercaría a conocer la verdad sobre la muerte de Jubany y ha calculado que a finales de la semana que viene deberían tener la respuesta.
Las medidas impuestas por el instructor son las que ha requerido tanto la acusación como Fiscalía, aunque los primeros habían sumado que no se comunicara ni con personas anteriores que hayan declarado u otras que lo puedan hacer.
Salellas ha precisado que desde la defensa de Jiménez se ha pedido el sobreseimiento de la causa y que "se encuentra en un juicio paralelo y la condena de los medios de comunicación".
Además, ha apuntado que pedirá nuevos testigos, aunque el principal --el padre del acusado-- "no se encuentra en disposición", ya que tiene edad avanzada y no recuerda nada, porque Jiménez ha contado que la noche del 30 de noviembre de 2001 --cuando se fija la fecha de la desaparición de Helena Jubany-- durmió en casa de sus padres.