El Juzgado de Instrucción número 6 de Castellón que investiga las actividades de una secta en una masía de Vistabella del Maestrat ha acordado el ingreso en prisión de tres de los nueve detenidos, incluido el presunto líder del grupo, por delitos de agresión y abusos sexuales, tanto contra adultos como contra menores, trata de seres humanos y exhibición de pornografía.

Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, la operación se desarrolló el pasado martes en la citada masía y la titular del juzgado recibió este jueves a los nueve detenidos y acordó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de tres de ellos, entre los que figura el presunto líder del grupo.

Los otros seis han quedado en libertad provisional con medidas cautelares de alejamiento y prohibición de comunicación respecto a las víctimas, según las mismas fuentes.

Abuso sexual y trata de seres humanos

La causa, que está declarada secreta, está abierta, entre otros, por delitos de agresión y abuso sexual, tanto contra adultos como contra menores de edad, trata de seres humanos con fines de dominación doméstica y sexual, y exhibición de pornografía a menores, sin perjuicio de ulterior calificación.

En este caso, la Generalitat Valenciana ha asumido la tutela de dos menores que vivían en la masía, según han informado a EFE fuentes de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas. La jueza que instruye el caso ha decretado la suspensión de la patria potestad de estos dos menores, por lo que han sido acogidos por la administración pública.

Por el momento se desconocen más detalles respecto a la situación de estos menores debido al secreto de sumario.

Nadie en el pueblo sospechó ni hubo rumores

El alcalde de Vistabella del Maestrat, Jordi Alcón, explicó que nadie en el pueblo sospechó de posibles actividades ilícitas cometidas en la masía, situada a unos ocho kilómetros del núcleo urbano, de 330 habitantes, en dirección a Castellón de la Plana.

Tampoco se habían escuchado rumores ni comentarios sobre las posibles irregularidades que se estuvieran cometiendo en el lugar, añadió Alcón.

Modo de vida "alternativo"

Los habitantes de la masía, indicó el alcalde, tenían un modo de vida "alternativo" y entre ellos había niños y adultos, alguno de los cuales sí que estaban empadronados en Vistabella, aunque ningún menor acudía a su centro escolar.

La zona donde se ubica la masía es de tamaño grande y en ella desarrollaban labores de agricultura y ganadería, por lo que eran bastante "autosuficientes", aunque sí acudían a Vistabella en ocasiones a hacer compras y "nunca dieron problemas" ni destacaron por ningún asunto particular, según el alcalde.