Donostia - La vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) Victoria Cinto dijo ayer que, cuando una mujer está “en peligro grave e inminente” de sufrir violencia machista, los jueces “deben acudir a medidas contundentes de protección” como la prisión provisional para el potencial agresor.
Cinto hizo estas declaraciones en Donostia, tras participar en la inauguración de un curso de verano de la UPV/EHU sobre “propuestas legislativas” y “derechos de las víctimas” en materia de violencia de género, junto a la consejera de Trabajo y Justicia del Gobierno Vasco, María Jesús San José.
La vocal y miembro del Observatorio de Violencia de Género del CGPJ aseguró que la Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género “es una buena ley” y, junto a las campañas de concienciación, está haciendo que el maltrato machista, “que ya existía, esté aflorando” y ahora “las mujeres denuncien más”. De hecho, ha recordado que en el primer trimestre de 2017 se han registrado unas 40.500 denuncias por delitos de este tipo en órganos judiciales.
Sin embargo, consideró que, cuando “hay mujeres que son asesinadas con una orden de protección en el bolsillo”, resulta “evidente que algo estamos haciendo mal” porque “el sistema institucional no ha sido capaz de protegerlas”. “Las medidas de protección están fallando”, las que se articulan para la detección y evaluación del riesgo, dijo la magistrada, quien agregó que, una vez que las víctimas “entran en el sistema de Justicia” porque ya han denunciado, éste “debe protegerlas”.
Victoria Cinto comentó que, si bien no se puede saber “cuántas órdenes de protección disuaden al maltratador y cuántos actos de maltrato se han ahorrado con ellas”, estas órdenes “no son un papel mágico” que “detiene” al presunto agresor, por lo que, en los casos más graves, se debería acudir “a opciones mucho más contundentes, como la prisión provisional”, antes incluso que “cercenar la libertad de la víctima” poniéndole escolta.
Insistió en que el hecho de que una víctima se encuentre “en peligro grave e inminente” es “uno de los supuestos” previstos para decretar prisión provisional, pero lamentó que esta medida “se adopte muy pocas veces en temas de violencia de género”. La vocal del CGPJ opinó que es preciso invertir en prevención y educación,
Servicio vasco de atención La consejera vasca de Justicia se centró por su parte en la atención a las víctimas y los servicios que presta el Ejecutivo vasco de cooperación con la Justicia, como el Servicio de Atención a la Víctima, que atendió el año pasado a cerca de 3.000 personas, de las que el 52% eran mujeres que han sufrido violencia machista. Un servicio “pionero y modelo” que, según subrayó San José, es “público, voluntario y gratuito” y ofrece una atención integral que incluye asesoramiento sobre asistencia jurídica gratuita y ayudas económicas específicas, y valora la necesidad de intervención psicológica, entre otras intervenciones. - Efe