MADRIS. La reina Sofía, que siempre ha mostrado una especial sensibilidad hacia estos animales, ha vuelto a amadrinar el "estreno" de la osezna, con la que el zoo de Madrid vuelve a tener cuatro ejemplares de la especie.
Sofía ha estado acompañada del embajador de China en España, Lyu Fan; del director del Zoo Aquarium de Madrid, Ricardo Esteban, y del consejero delegado del Grupo Parques Reunidos, Fernando Eiroa.
Desde el mirador que hay junto a la pradera, la reina ha visto salir primero de la pagoda a Hua Zui Ba y, poco después, le ha seguido Chulina, que ya pesa unos 15 kilos, después de que naciera con apenas 180 gramos.
Es la quinta cría de oso panda gigante que se alumbra en el zoo madrileño después de cuatro machos: el mítico Chulín (1982), los gemelos Po y De De (2010) y Xing Bao (2013).
El primero ya falleció, la pareja regresó a China y Xing Bao sigue en Madrid junto con Bing Xing, que completa el cuarteto de ejemplares que hay en el zoo.
Los responsables del parque animal han informado a Sofía de la evolución de la nueva cría mientras ésta conocía su nuevo hábitat exterior y su madre comía ramas de bambú. "Enhorabuena", les ha dicho la madre de Felipe VI a las cuidadoras de las osas mientras posaban ante los fotógrafos.
Maica Espinosa, una de las responsables del cuidado de Chulina, ha explicado que "la reproducción de los pandas es un proceso complicado porque entran en celo muy pocas horas al año".
"Tienen que darse unas condiciones especiales. Han de estar contentos, bien alimentados, no tener estrés... para que la gestación salga adelante", ha reseñado Espinosa.
Chulina permanecerá en Madrid sus primeros años y luego regresará a China, como en poco tiempo hará Xing Bao, que ahora tiene tres y medio.
El Gobierno de Pekín regalaba antes los pandas por tiempo indefinido, pero desde hace unos años, obliga a que las crías nacidas en el extranjero, una vez superada la primera fase de crecimiento, vuelvan a la reserva china de Chengdu, donde se concentran buena parte de los alrededor de 1.800 ejemplares que viven en libertad.
Ello explica que el célebre Chulín (1982-1996), el primer panda nacido en cautividad en Europa, pasara toda su vida en el zoo de Madrid, mientras que los gemelos Po y De De retornaran al país asiático con dos años y medio.
Los primeros dos osos panda -los padres de Chulín- llegaron a Madrid en 1978, después de un viaje oficial del rey Juan Carlos y la reina Sofía a China.
En 2007, también de la mano de los reyes, llegó en régimen de alquiler una nueva pareja -Hua Zui Ba y Bing Xing-, que tuvo a los gemelos en 2010.
El zoo de Madrid es el que cuenta con más pandas, cuatro, de los catorce que hay en toda Europa.
En Viena y en Pairi Daiza (Bélgica) hay tres, mientras que los zoológicos de Edimburgo (Reino Unido) y Beauval (Francia) tienen dos cada uno.