Granada - El hombre más obeso de España, un joven de 29 años que este año ha llegado a pesar más de 300 kilos, se sometió ayer a un bypass gástrico por laparoscopia en el hospital La Inmaculada de Granada, con instrumental e infraestructura especiales, para poder adelgazar 200 kilos. La técnica permitirá que Juan Manuel Heredia, un joven de 29 años vecino de Algeciras (Cádiz), adelgace todo ese peso en un plazo aproximado de entre 18 y 24 meses.
La intervención se realizó en el centro laparoscópico del doctor Carlos Ballesta del citado hospital, especializado en estos tratamientos y con más de 3.000 enfermos operados anuales; es el único de estas características en Andalucía, que también realiza estas cirugías en Madrid y Barcelona.
El médico detalló que, a pesar de la dilatada trayectoria, las especiales características de Heredia conllevaron un esfuerzo mayor y el despliegue de una infraestructura especial para adaptarse a las condiciones físicas del paciente. El hospital adaptó su traslado, colocó una mesa especial para el quirófano que soportara su peso, doble cama, transporte en grúa e instrumental especial, ya que el material quirúrgico se tuvo que adaptar para obesos extremos.
pésima calidad de vida El joven, que llegó a la consulta de Ballesta derivado por su médico de cabecera, tiene una comorbilidad extrema, padece apnea del sueño, diabetes, hipertensión incipiente, hepatitis grasa severa, dificultad respiratoria y el sobrepeso ha deformado sus articulaciones.
Todo ello ha limitado su calidad de vida, ya que ha mermado sus movimientos y es dependiente para gestos cotidianos como levantarse o asearse. “Se ha sometido ya a tratamientos y ha rebajado su peso, y será el paciente con más kilos que se someta a este tipo de intervención, que tiene como novedad que utiliza una técnica reversible porque se trata de un paciente muy joven”, apuntó el cirujano.
Para abordar la intervención, el equipo médico usó un bypass de asa larga -un procedimiento ideado por Ballesta-, lo que permitirá al paciente adelgazar 200 kilos en un plazo aproximado de entre 18 y 24 meses. La operación mixta reducirá la capacidad de comida que puede absorber el joven y además modificará el circuito de su aparato digestivo, aunque sin cortes en el intestino para que se pueda revertir.
“Se ha hecho un traje a medida de las características del paciente”, resumió el doctor que lidera el equipo de la operación, que dividirá el estómago del joven para hacerlo más pequeño, con lo que pasará de albergar unos dos litros a cincuenta mililitros. “Tendrá saciedad inmediata, no tendrá hambre; ahora tiene que esforzarse y comer muchas veces”, apuntó el doctor.
Heredia empezará a ingerir alimentos 24 horas después de salir de quirófano y podrá abandonar el hospital en tres días para afrontar una nueva vida en la que, durante los primeros meses, perderá una media de quince kilos mensuales para reducir el ritmo hasta los cuatro o cinco, con un control de ingestas y ejercicio. Antes de someterse a la intervención, el paciente reconoció no hacer “caso” de los médicos y haber descuidado su alimentación, aunque confió en poder tener una nueva vida. - Efe