Bilbao - El consejero de Empleo y Políticas Sociales, Juan María Aburto, recomendó ayer abordar el tema de la inmigración con una visión abierta que nos aleje de la "perspectiva de lo único", ya que esas actitudes llevan a conceptos como "primero los de casa". Aburto, que intervino en la apertura del XXIV Encuentro de la Abogacía sobre Derecho de Extranjería y Asilo, calificó de "sobrecogedores" los datos que ONG como CEAR proporcionan cada año sobre inmigrantes, refugiados y apátridas. Ante unos doscientos abogados especializados en extranjería procedentes de todo el Estado, el consejero señaló que se deben evitar los "muros mentales" que a menudo levantamos ante los inmigrantes, porque "nadie sale de su país si no tiene la esperanza de algo mejor" y dijo que la pregunta que debe hacerse la sociedad es: "¿A cuánto bienestar estamos dispuestos a renunciar para mejorar las condiciones de vida de los más desfavorecidos?". Juan María Aburto apuntó que Europa está viviendo un momento importante relacionado con los movimientos de población y censuró algunas actitudes restrictivas que denominó "hospitalidad cuarteada". El consejero contrapuso las limitaciones que las fronteras imponen a las personas con la libertad de circulación que hay para el capital, las transacciones financieras y el turismo y destacó que esos flujos económicos "no están compensados en sentido inverso por el derecho a la migración de las personas".
hospitalidad Dijo también que hay que "contrarrestar la hospitalidad menguante de los países ricos" y crear un mundo con "fronteras porosas, que garanticen los principios de humanidad y dignidad para todos así como los derechos de residencia y circulación" . Antes de la intervención de Aburto, el presidente de la subcomisión de extranjería del Consejo General de la Abogacía, Pascual Aguelo, señaló que según los últimos datos, en el Estado español "hay algo más de cinco millones de personas migrantes, de las que la mitad tienen ciudadanía de la UE y el 75% de la otra mitad son residentes de larga duración". Aguelo reconoció que hace unos veinte años, cuando los abogados expertos en extranjería empezaron a reunirse "apenas podíamos intuir la importancia del fenómeno migratorio en España".