Bruselas - Hoy por hoy sigue siendo imposible montarse en un tren en Bruselas y descender en Hendaia debido a un sector fragmentado y con excesivas barreras. Problemas como este son los que quiere resolver el cuarto paquete ferroviario sobre el que se pronunciará hoy el pleno del Parlamento Europeo. Seis propuestas legislativas con las que la Eurocámara aspira abrir el sector a la competencia, facilitando la entrada de nuevos operadores y simplificando procedimientos de certificación lo que ahorrará costes y tiempo a las empresas a la hora de poner trenes en circulación.
"El ferrocarril es una de las claves en la revolución que necesitamos para cambiar el concepto de transporte por una gestión integrada de la movilidad. En este sector no existe un espacio único europeo porque nos negamos a abandonar y transformar un modelo de negocio que los tiempos han dejado anticuado", advirtió ayer la eurodiputada Izaskun Bilbao, ponente de una de las patas del paquete ferroviario como es la propuesta sobre interoperabilidad, sobre los monopolios que aún persisten en la mayoría de los Estados miembros.
Su documento aspira a "talar" las 11.000 reglas que impiden la aparición de nuevos operadores y que obligan a las empresas a dedicar un 30% del coste del producto a la burocracia. "Se trata de modernizar y europeizar el sector ferroviario. Es la última oportunidad", añadió, por su parte, la socialista Inés Ayala. La propuesta aboga por convertir a la agencia ferroviaria europea en una oficina capaz de homologar y autorizar los trenes que puedan circular por Europa en un plazo que podría establecerse en cuatro años. Al trámite parlamentario le seguirá en los próximos meses una dura negociación con los gobiernos europeos. - Silvia Martínez