córdoba. El presidente de la Audiencia Provincial de Córdoba, Eduardo Baena, pidió ayer que se regule jurídicamente "de una vez por todas" el secreto de sumario en fase de instrucción, para evitar "filtraciones escandalosas" como las que ha habido en el caso de José Bretón. Si bien para el presidente de la Audiencia el seguimiento del juicio ha sido modélico "de puertas para adentro", no tanto se puede decir de la fase de instrucción o del papel de ciertos testigos que han aparecido en televisión durante el desarrollo del proceso judicial.
En este sentido, no quiso poner nombres y criticó a todas y cada una de las personas que hayan entrado en el "terreno tertuliano" mientras se celebraba el proceso.
"No es de recibo que un señor o señora que va de testigo a un juicio oral su testimonio lo esté dando en un plató de televisión, porque esa declaración es totalmente nula", puntualizó el magistrado. Por otro lado, demandó que se regule jurídicamente el secreto de sumario en fase de instrucción para que sea conciliable con el derecho de información, que "no es absoluto y tiene límites". A su juicio, es necesario establecer un sistema que permita la difusión salvo en aquellas cuestiones que sean reguladas o se pacten entre los medios y el tribunal, lo que daría una mayor seguridad jurídica.
Baena, que eludió hacer una valoración judicial sobre la sentencia, avanzó que ésta probablemente verá la luz la semana que viene, y especificó que, en caso de que los recursos lleguen hasta el Tribunal Supremo, se resolvería aproximadamente en el primer trimestre de 2014. Será entonces, ha continuado, cuando, si todas las instancias resuelven la culpabilidad de Bretón, se devuelvan los huesos a Ruth Ortiz. "Respetando el dolor de la madre, esos huesos, mientras la sentencia no sea firme, no se sabe de quién son", manifestó Baena, que también resaltó el "prestigio acreditado, la templanza y sentido común" del magistrado Pedro Vela, presidente del tribunal que ha juzgado a Bretón.