amurrio. La villa ayalesa de Amurrio ha sorprendido esta semana con el anuncio de un cambio en el calendario de sus fiestas patronales en honor a Nuestra Señora de la Asunción y San Roque. De hecho, en esta edición los festejos no tendrán lugar del 11 al 17 de agosto, sino del 9 al 17, pero con una interrupción de tres días, que afecta a las jornadas del 11 al 13 de agosto y que dejará a la población con seis días de diversión, en lugar de siete.
En concreto, el pistoletazo de salida -según han dado a conocer desde el Ayuntamiento- tendrá lugar el sábado 9 de agosto con la lectura del pregón de manos de Josefina Burutxaga. Ella lo hará en nombre de los donantes de sangre. La jornada también acogerá el lanzamiento del txupinazo. El programa continuará el domingo 10 de agosto con la jornada dedicada al colectivo infantil, en la que actuará el quinteto de ska y punk rock navarro Vendetta. Después tendrá lugar el citado parón festivo, para continuar la fiesta el jueves 14 con el día de los jóvenes de ayer y las cuadrillas, con la actuación nocturna del cantante Huecco.
Las tres últimas jornadas festivas respetarán la tradición, pese a coincidir con los sanroques del vecino Llodio. Así, el viernes 15 será el día de Nuestra Señora, el día 16 la festividad de San Roque, y el día 17 la despedida gastronómica en las campas del patrón. Aunque las fechas están definidas, la Comisión de Fiestas de Amurrio continúa trabajando en la confección de la programación de eventos dirigidos a todas las edades. De hecho, el 22 de abril tendrá lugar una nueva comisión abierta, a las 18.30 horas en la Casa de Cultura.
Una de las protagonistas indiscutibles de esta edición festiva es su pregonera, que es la portavoz de la Asociación de Donantes de Sangre en esta villa ayalesa, Josefina Burutxaga Ibarrola, que el sábado fue investida en el Amurrio Antzokia con la insignia Guk de oro que la ha proclamado amurrioarra del año 2012, en reconocimiento a la impagable labor altruista y voluntaria que ha llevado a cabo en cuatro décadas.
De hecho, Josefi -como se la conoce cariñosamente en el municipio- comenzó a donar sangre en 1973 tras una dura experiencia que le marcó profundamente y que le hizo concienciarse sobre la necesidad de donar sangre. "Mi marido tuvo un accidente cuando aún éramos novios. Le atropelló un coche y el conductor, entonces delegado de Amurrio de la Asociación de Donantes de Sangre de Álava, se encargó de buscar a cinco personas donantes para salvarle". A raíz de este incidente "mi marido y yo nos hicimos donantes y también más familiares".
donaciones de sangre Desde entonces Josefina se ha implicado en cuerpo y alma con esta causa solidaria. No en vano, ha superado la barrera de las cien donaciones y desde hace 25 años ostenta la responsabilidad de ser la delegada en Amurrio de la citada asociación. La protagonista de la velada recordó a todos los asistentes que "la sangre no se fabrica, sólo puede venir de otro ser humano y dura muy poco. De ahí la necesidad de las donaciones".
Amurrio es ejemplo de ello puesto que al año se realizan en la villa cerca de 700 donaciones, cifra que ha puesto a la localidad en la parte alta del ranking alavés. "Lo que más me gustaría es que de aquí a cinco años se doblara el número de donantes porque sé la necesidad que hay y lo importante que es realizar ese gesto", apuntó Josefina, animando a todo el mundo a hacerse donante.