DONOSTIA. Según ha informado el Departamento de Seguridad, los hechos tuvieron lugar hacia las 02.30 de esta madrugada, cuando la Ertzaintza recibió el aviso de que la alarma de un bar situado en el número cuatro de la calle Santa Elena de Irun había saltado por un posible escape de gas.

Al llegar al lugar, la Ertzaintza desalojó a los vecinos por precaución y después de que el establecimiento fuera inspeccionado por los bomberos, éstos comprobaron que no existía ningún escape. Los vecinos volvieron a sus casas a las 03.20 de la madrugada.