BILBAO. Ayer domingo, desde primera hora de la madrugada, agentes de la Unidad de Tráfico de Gipuzkoa y de la ertzain-etxea de Bergara se coordinaron y realizaron un control de alcohol y drogas en la carretera GI-627 a su paso por esta localidad. Durante estas tareas, se realizaron pruebas de detección alcohólica a 65 conductores, arrojando 8 de ellos un resultado superior al permitido.

Dieciséis conductores también tuvieron que realizar el test de drogas y 10 dieron positivo. Durante el control también se registró una detención de un joven de nacionalidad francesa que circulaba careciendo de permiso de conducir. Otro conductor también fue imputado por haber perdido todos los puntos del carnet.

Este control se engloba dentro de las campañas especiales de controles de droga en las carreteras vascas, con el fin de atajar la elevación del consumo que se detectó a lo largo del último año. Este fin de semana además coincidía con una macrofiesta en un recinto de Bergara. Determinados factores, junto a la falta de percepción del peligro, agravan el porcentaje de riesgo al volante, especialmente entre los jóvenes.