A punto de cumplir un año como diputado general, ¿qué tal ha ido? Porque, claro, un Gobierno en minoría y con la que está cayendo no habrá sido fácil.
Pues no, fácil, no. Ha sido necesario dedicar mucho tiempo y esfuerzo a ir avanzando en la adaptación de la Administración a esta situación en la que nos encontramos y a la que tenemos que plantar cara.
¿Qué acuerdos ha buscado con la oposición?
Lo que hemos pretendido es dar estabilidad a la institución, hacer una priorización del gasto y salvar algunas cosas básicas, que son las prestaciones propias de la Diputación, sus servicios públicos, garantizarlos y garantizar las prestaciones sociales, cosa que no es fácil porque hemos tenido unos descensos muy importantes de capacidad adquisitiva. Aparte hemos tenido también unos compromisos económicos anteriores debidos a ciertas circunstancias, que han limitado adicionalmente el Presupuesto. Y eso lo hemos conseguido hacer con el apoyo principalmente del PSE, que votó los Presupuestos y también gracias a la abstención del PNV, que en buena medida entendió que había pocas alternativas a una política que, como digo, no se distinguía sino por la sobriedad, la austeridad y por querer sacar la Administración adelante.
Y si lo han conseguido con menos ingresos y sin tocar el gasto social, incluso aumentándolo porque hay más demanda, como dice usted, ¿por qué no le da la receta a Rajoy?
Bueno yo creo que la situación en la que se encontraba el Presupuesto nacional era mucho peor que la que teníamos aquí y yo creo que lo que se ha hecho aquí no sería posible hacerlo en el conjunto de España.
Usted se ha plantado en algunas de las medidas, por ejemplo, en ésta que hemos llamado todos amnistía fiscal, aunque el Gobierno la ha llamado de otra manera. ¿Sigue creyendo que no es acertada?
Bueno vamos a ver, ésta es una medida que se ha tomado en otras ocasiones y se ha llevado adelante por el PSOE, principalmente, que fue el impulsor desde el Gobierno de España y por el PNV que la implantó aquí, en el País Vasco. Es más, lo hizo en las tres diputaciones dando una prima a los defraudadores que tenía un tipo de interés fijo durante unos años y de una absoluta opacidad. Ésta es una práctica que se ha empleado porque hay un interés general y razonable de hacer aflorar el dinero negro. Eso es lo que ha intentado hacer ahora Rajoy. El motivo por el que no lo he querido llevar adelante esta iniciativa, entre otras razones, es porque la situación en Álava nos conducía a un sinsentido que, desde luego, a mí me hubiera hecho muy difícil el poder llevar adelante mi trabajo.
¿Qué tal están las Cuentas?
Las cuentas desde luego hoy están peor que hace cinco años, como es natural y no podía ser de otra manera. El diputado general del PNV decía una frase que repetía muchas veces, y yo la recuerdo muy bien, decía "si hay un momento bueno para endeudarse es éste". Y efectivamente dejó la Diputación bastante endeudada. Esa práctica ha fracasado, la práctica del estímulo económico ha fracasado en España y también ha fracasado en el País Vasco. Y ahora lo que tenemos es una deuda importante que tenemos que solventar.
Estamos asistiendo a un momento de bastante confusión respecto a la cuestión de las competencias..
Yo creo que el Gobierno Vasco está haciendo una invasión de competencias y además creo que no lo está haciendo sin darse cuenta, sino que está haciendo una invasión deliberada de competencias.