vitoria. De poco o de nada han servido los intentos por tratar de atraer vecinos a la zona rural. La macrocefalia de la capital amenaza el equilibrio poblacional del territorio, hasta el punto de que tres cuartas partes de la población siguen optando por fijar su residencia en Vitoria. Entre quienes se decantan por otras localidades, la mayoría lo hace por Amurrio y Llodio, que aglutinan a 28.470 vecinos, es decir, el 10% del total. La falta de servicios en la zona rural y las mayores posibilidades para encontrar un empleo son los principales motivos por los que la ciudad sigue conservando su atractivo.

Ni siquiera el precio elevado de la vivienda ha frenado el deseo de seguir residiendo en la capital. Si hace no mucho tiempo algunos vitorianos se marchaban a los pueblos buscando casas más baratas, la cantidad de VPO construidas durante los últimos años en Vitoria, muchas de ellas aún sin adjudicar, ha hecho que se replanteen esta decisión. Según los últimos datos del Padrón municipal, Vitoria acoge un total de 238.247 habitantes de los 317.352 que tiene Álava. La cifra, de hecho, va en aumento hasta el punto de que es la única provincia vasca que mantiene ininterrumpidamente un balance migratorio favorable.

Es decir, son más los que llegan que los que se van. En ello tiene mucho que ver la cantidad de inmigrantes que recibe este territorio. Actualmente, el colectivo representa ya más del 10% de la población, una cantidad que va en aumento. Ni siquiera los políticas sociales cada vez más restrictivas han logrado frenar su llegada.