Vitoria. El fantasma del temporal de granizo que tuvo lugar en Vitoria el primero de julio de 2009 volvió a sobrevolar ayer la capital alavesa. A las 16.30 horas, el cielo se oscureció y una enorme tormenta descargó una tromba de agua seguida, media hora más tarde, de una lluvia de granizo que no arreció hasta las 18.00 horas. Aunque los daños registrados no fueron ni con mucho los de hace dos años, los Bomberos de Vitoria intervinieron sin descanso en todos los barrios de la ciudad para subsanar los efectos provocados por las inundaciones y los desprendimientos de falsos techos ocurridos en numerosas viviendas y naves industriales del territorio. En total, realizaron 32 intervenciones, dos de ellas en balcones desprendidos.

En esta ocasión, existía alerta previa. El Departamento de Interior había avisado del elevado riesgo de tormentas y granizo a partir del mediodía. No se cumplieron las predicciones más pesimistas, que apuntaban a 15 litros por metro cuadrado y, finalmente, Vitoria recibió seis litros, cantidad que llegó a duplicarse en otros puntos de la provincia, como Ozaeta y Arkaute.

Una de las zonas más afectadas por el temporal fueron los viales de Sidenor, que se vieron rápidamente anegados al igual que los establecimientos de la planta baja del centro comercial El Boulevard. También se vieron afectadas por el agua las áreas industriales de Gojain, Jundiz, portal de Vergara y Venta de la Estrella.