sevilla. Siete policías que inspeccionaron el piso donde presuntamente murió la joven sevillana Marta del Castillo dijeron ayer al juez que había restos biológicos de la víctima, posiblemente de sangre, en cuatro lugares distintos del dormitorio del asesino confeso, Miguel Carcaño.
En la quinta sesión del juicio contra el menor apodado El Cuco, los agentes indicaron que los restos biológicos hallados en la colcha, la cama, en una silla y en la mesa del ordenador pertenecían a Marta pero no pudieron certificar que fuesen de sangre, aunque añadieron que, por su experiencia, son restos que reaccionaron al luminol y la bencidina y en tales casos suelen ser de sangre.
Todas esas manchas habían sido lavadas, al igual que un resto "muy leve" del reposabrazos trasero del coche de la madre de El Cuco, aunque en ese caso la analítica no ha "concluido científicamente" que fuese sangre ni de qué persona, según los asistentes al juicio.
La abogada de los padres de Marta, Inmaculada Torres, explicó que estas declaraciones confirman su tesis del asesinato, de que en aquel piso "ocurrió un episodio muy violento" y de que el coche de la madre de El Cuco fue utilizado para trasladar el cuerpo.
Cinco de los policías declararon en la sala donde se enjuicia al Cuco, y los otros dos, por videoconferencia, y a ellos se unió el primer agente que tomó declaración al menor, quien aseguró que lo hizo de manera espontánea.
Junto a la limpieza del piso de León XIII de Sevilla y del coche, otra dificultad añadida es que una parte de las muestras se tomaron dos semanas después de la desaparición de Marta, cuando fue detenido Carcaño, y las otras, mes y medio después. Los policías también confirmaron que había huellas de El Cuco en una botella de ron hallada en el piso, en un tensiómetro y en la silla de ruedas presuntamente utilizada para transportar el cuerpo.
De la misma manera, se encontraron células epiteliales de Marta y Miguel en la silla de ruedas, que había pertenecido a la madre fallecida de Carcaño.
Los policías, según las fuentes, realizaron su exposición mediante diapositivas en las que explicaron los puntos del piso donde tomaron las muestras y especialmente en el lugar donde presuntamente Marta fue agredida sexualmente.