vitoria. Teófilo Ruiz de Viñaspre, como presidente de la asociación de cotos de caza de Álava y por ser de Rioja Alavesa, tiene constancia del daño que los jabalís están haciendo a los agricultores en las tierras de esta cuadrilla. Estos animales de caza mayor siempre acuden a este tipo de producciones por una misma razón, la de llenar su estómago, dado que "la viña en este momento está muerta. No tiene brotes verdes". En concreto, sus zonas preferidas para saciar el hambre son la del monte comunero de Laguardia y toda la de la sierra de Cantabria. No obstante, el perjuicio que provocan los jabalís es "puntual en algunas fincas", tal y como asegura Ruiz de Viñaspre.

A su juicio, la situación es más grave en la zona de Zambrana, ya que hay más animales que acuden a los sembrados de trigo, cebada, maíz y girasol en busca de alimento. Éste es el verdadero motivo por el que se adentran en las eras y no porque haya aumentado el número de ejemplares, puesto que, según matiza el presidente de ACCA, "se cazan menos y se ven menos".

Los permisos Hasta el momento, este colectivo, encargado de tramitar los permisos de batidas, ha autorizado 1.347 desde el 5 de septiembre hasta el próximo 6 de febrero. Una cifra prácticamente igual a la de la temporada anterior, en la que se alcanzaron los 1.334 permisos. Y en el total de batidas tampoco hay grandes sorpresas, puesto que se prevé que "este año será parecido el número del año pasado de 1.461", según informa Florencio Markina, técnico de la asociación.

El problema para acabar con los daños reside en la necesidad de ampliar las batidas más allá del 6 de febrero. Pero ello sólo le compete a la Diputación, quien afirma que siempre se autoriza la caza donde hay zonas afectadas. Pero insiste en que sólo el Consejo de Caza puede permitirlo.

Ante esta situación, Ruiz de Viñaspre opina que "tendría que reunirse con nosotros para sentar las bases de cómo podemos evitar este daño y de cómo solucionar el tema de las indemnizaciones porque la Administración es la que debe hacer de árbitro". No en vano, son los propios cazadores quienes tienen que compensar con su bolsillo a los agricultores damnificados por el jabalí. "En Rioja Alavesa hay varios daños en los cotos, pero en el resto de Álava los cazadores ya no pueden soportar el pago de las indemnizaciones".