vitoria. Compaginar la vida laboral con la familiar no siempre es tarea fácil y decidir si la empresa pone trabas o facilita la conciliación, tampoco. Sobre todo si se trata de la Administración pública. Una funcionaria del Gobierno Vasco ha demandado a éste por considerar que su derecho a una reducción de jornada ha sido "vaciado de contenido". La mujer, que debe acudir cada día a trabajar a las 9.30 horas, argumenta que con este horario no puede llevar a sus hijas al colegio porque el momento de entrada es el mismo en ambos lugares. El Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Vitoria juzgará hoy si el proceder de Lakua se ajusta a la legalidad que la propia institución propugna.

La mujer, que disfruta de jornada reducida y que tiene hijas menores a su cargo, sostiene en su demanda que, aunque el derecho a la reducción de jornada por cuidado de los hijos está reconocido en la normativa, la Dirección de Relaciones Laborales del Gobierno Vasco ha emitido una circular en la que no permite que la entrada al trabajo se realice más allá de las 9.30 horas. La demandante señala que la orden dada por el Gobierno Vasco representa un obstáculo que en muchos supuestos torna impracticable la citada conciliación de la vida laboral y familiar.

"Resulta paradójico que, a pesar de la legislación aprobada en el Congreso, el Senado, el Parlamento Vasco y el propio Gobierno Vasco, que reconoce el derecho del funcionariado a reducir su jornada para atender a menores, una circular dictada por un cargo con rango de director se imponga por encima del resto de las instituciones", explicaron ayer los responsables del sindicato LAB, que respalda a la trabajadora.

La demandante reclama que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Vitoria determine si es o no legal lo dispuesto en la circular en los supuestos de reducción de jornada. Una "falta de flexibilidad", que asegura no se impone cuando la reducción de jornada es motivada por el cuidado de personas mayores dependientes o por la asistencia a clases de euskera ya que, según subraya la funcionaria, "estas personas tienen posibilidad de realizar su entrada en un momento posterior".

La sentencia que derive de este proceso podría se pionera en el ámbito de la función pública vasca, ya que se solicita que se reconozca el derecho del personal al servicio de la Administración de la CAV a reducir su jornada "en el horario que convenga a sus intereses personales y a los de su descendencia".