Estas son las razones por las que debes rebajar el consumo de sal
La cantidad diaria recomendada por la Organización Mundial de la Salud es de 5 gramos, ya que su exceso tiene una serie de riesgos para la salud, como la presencia de hipertensión, que puede derivar en otras complicadiones
Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, la población del Estado consume demasiada sal.
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En concreto, un 80% de la población excede la cantidad diaria recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que es de 5 gramos –lo equivalente a una cucharita de café–, lo que puede resultar perjudicial para la salud. Y es que a pesar de que el sodio que proporciona es esencial para regular el volumen sanguíneo y la presión arterial, si se consume en exceso puede provocar hipertensión y diferentes patologías de los sistemas cardiovascular y renal.
La OMS incluso va más allá en sus recomendaciones y aconseja reducir la ingesta a los 2 gramos diarios si realmente queremos evitar estas enfermedades. Y es que está claro que menos sal es más salud. Por eso, resulta imprescindible comenzar a reducir su consumo siguiendo esas pautas.
Una estrategia sencilla y eficaz es empezar instaurando pequeñas conductas: no agregar sal en la preparación de alimentos; no llevar el salero a la mesa; evitar alimentos procesados y envasados como queso, embutidos o snacks; leer las etiquetas para elegir los productos de bajo contenido en sodio y reducir salsas. Este conjunto de acciones basta para reducir los principales problemas cardiovasculares.
Riesgos
Consumir sal y superar la cantidad recomendada tiene una serie de riesgos para la salud que pueden empezar a manifestarse a largo plazo. El principal es la presencia de hipertensión que aumenta el riesgo de sufrir un infarto de miocardio, ensanchamiento del corazón e insuficiencia cardíaca. Esta puede derivar en:
- Enfermedades cardiovasculares: son la principal causa de muerte en todo el mundo, según la OMS. El consumo excesivo de sal se acompaña de una falta de ejercicio físico y hábitos nocivos como el tabaco o el alcohol.
- Accidentes cerebrovasculares: se manifiestan con un entumecimiento de los músculos que puede desembocar en una dificultad para caminar, pérdida de equilibrio o, incluso, de la conciencia.
- Cardiopatía coronaria: aumentan el riesgo de sufrir ataques cardíacos o insuficiencia cardíaca, así como otras complicaciones. Según la OMS, en el 2015 se produjeron hasta un 7,4% de muertes debido a esa enfermedad.