Seguro que más de una vez te has sentido muy incómodo, con la sensación de tener la tripa hinchada; te sientes pesado, la cinturilla del pantalón te aprieta más de lo habitual y no puedes parar sentado.

Esta hinchazón abdominal puede aparecer en cualquier momento del día, pero lo más habitual es que sea menor por la mañana, vaya en aumento por la tarde y sea más intensa después de las comidas.

Gases, indigestión, infección estomacal, exceso de bacterias en el intestino delgado, retención de líquidos, intolerancia a los alimentos como la lactosa o el gluten, gastroparesia o trastornos intestinales crónicos, como el síndrome del intestino irritable (SII) y la enfermedad de Crohn, son algunas causas frecuentes de la hinchazón estomacal.

Alimentos que hay que evitar

Para acabar con esta desagradable sensación es importante en primer lugar evitar los alimentos que la provocan. Si tu cuerpo tiende a hincharse de por sí, deberías cortar el consumo de lácteos, ya que son el principal factor de que esto suceda.

Mientras la fibra es esencial, consumida en exceso puede causar hinchazón, así que debes tomarla con moderación; los alimentos grasos y fritos también pueden retrasar el vaciado del estómago provocando sensación de llenos.

En el caso de las alubias, las lentejas, el brócoli, las coles de Bruselas, la coliflor y el repollo pueden producir gases, así que es necesario cocinarlos bien para evitarlos. Los refrescos y las bebidas con gas también pueden producir hinchazón debido a que introducen una cantidad adicional de aire en el sistema digestivo.

Un hombre con hinchazón abdominal.

Productos que debes consumir

Así como hay unos alimentos que producen hinchazón, hay otros que ayudan a reducirla. Es el caso del yogur con probióticos, que contribuye a equilibrar la flora intestinal; del jengibre, que tiene propiedades antiinflamatorias, y de la menta y el té de menta, que relajan los músculos del sistema digestivo y alivian la inflamación estomacal.

Recuerda que si consumes harinas y cereales siempre será mejor que sean integrales, puesto que favorecerán una mejor digestión y te sentarán mejor.

El agua también tiene un papel importante para reducir la inflamación, puesto que mantenerse bien hidratado puede ayudar a la digestión.

Hábitos alimentarios

La forma en la que comemos también influye a la hora de evitar la incómoda sensación de la hinchazón. Es importante comer despacio y masticar bien los alimentos para tragar menos aire y facilitar la digestión. Debes evitar comer en exceso y mejor hacerlo en porciones pequeñas y con mayor frecuencia. Destierra de tu dieta los edulcorantes artificiales como el sorbitol o la fructosa, que pueden causar gases.

Estilo de vida saludable

Tener unos hábitos de vida saludables siempre es beneficioso y te ayudará a evitar la hinchazón abdominal. Hacer ejercicio de forma regular puede ayudar a mover los gases a través del sistema digestivo; si puedes, camina de forma ligera después de las comidas.

El estrés afecta de forma negativa a tu sistema digestivo, así que practicar técnicas de relajación como el yoga, la meditación o la respiración profunda te puede ayudar. Fumar y comer chicle hará que tragues más aire del habitual y acabe en tu estómago con el consiguiente perjuicio.

Debes vigilar además la ropa que te pones ya que, si te aprieta demasiado en la cintura, notarás una presión excesiva en el abdomen y te sentirás especialmente molesto.

Es aconsejable evitar la ropa demasiado ceñida si se sufre hinchazón abdominal.

Comenzar bien el día

Como ya hemos comentado, para no sentirnos hinchados es muy importante prestar atención a la alimentación. Así, es importante hacerlo desde primera hora de la mañana, ya en el desayuno, consumiendo alimentos frescos. Frutas como la piña, el melón, la sandía o las frambuesas son unos muy buenos aliados contra la inflamación estomacal.

Si sientes que en determinados momentos del día la cintura de tu pantalón se encoge de repente, revisa tus hábitos y tu alimentación; tal vez en ellos encuentres la respuesta a lo que te ocurre y la solución para acabar con esa tripa hinchada que tanto te incomoda.