Nueva vuelta de tuerca de Junts per Catalunya. Esta vez sobre su apoyo al techo de gasto y la senda de déficit y deuda que el Gobierno español necesita aprobar imperiosamente si quiere presentar y aprobar los Presupuestos Generales del Estado para 2025. La portavoz de la formación independentista en el Congreso de los Diputados, Míriam Nogueras, advirtió este domingo a Pedro Sánchez de que su apoyo a la senda está condicionado a que las propuestas del Gobierno “mejoren las condiciones de Catalunya”.

El Ejecutivo de Sánchez retiró a principios de la semana pasada la senda de estabilidad (el plan que fija los límites de déficit y deuda de las administraciones) que iba a votarse dos días después en el Congreso. La propuesta no iba a prosperar ante la oposición de Junts, por lo que el Gobierno aparcó el proyecto para evitar que el partido de Carles Puigdemont lo tumbara por segunda vez, después de que el pasado julio sus siete votos en contra impidieran su aprobación.

“Si se quiere aprobar otra senda de estabilidad, el Gobierno español deberá presentar una propuesta que sí mejore las condiciones de Catalunya y de los catalanes. Si quieren que las cosas sean diferentes, las tienen que hacer de forma diferente y si se cumple con Catalunya nosotros también cumpliremos”, señaló Nogueras en declaraciones a los periodistas en el marco del Alderdi Eguna del PNV en las campas de Foronda, donde asistió en representación de su partido.

Tras recordar que desde algunos sectores se avanzó que Junts finalmente cedería y apoyaría la senda fiscal, Nogueras lanzó un mensaje al Gobierno: “Nosotros no especulamos, sino que valoramos las cosas en función de los hechos y un hecho irrefutable es que el Gobierno retiró la senda y lo hizo a pesar de todos esos especuladores que decían que no había alternativa”.

Sánchez dio un giro de timón y retiró la senda de estabilidad para evitar una nueva foto de fracaso y para ganar tiempo y seguir negociando con Junts. Pese a los órdagos, la formación independentista no terminaba de romper la baraja y el Gobierno veía un margen. Mandó a Suiza a su lugarteniente Santos Cerdán para que se reuniera con Puigdemont y, tras certificar que los catalanes no iban a dar su brazo a torcer, detectaron su disposición a la negociación.

Presupuestos 2025

El Gobierno español juega con los tiempos y espera a que pasen los congresos de Junts y también de ERC en octubre y noviembre para volver a sentarse con este tema sobre la mesa, confiando en que tras las batallas internas y los nuevos liderazgos que de esos procesos puedan salir, ambas formaciones tendrán más fácil aprobar la senda. Moncloa parece dispuesta a intentar sacar adelante los Presupuestos mediante la presentación en su momento del proyecto de ley correspondiente, aunque desde el Gobierno admiten que no sería un drama gobernar un año más sin cuentas. La gobernabilidad no se vería comprometida por ello, máxime cuando Sánchez podría compensar la desactualización presupuestario con los multimillonarios fondos europeos que aún le quedan por ejecutar.

Desde Moncloa consideran que la decisión de Sánchez, da “una oportunidad al acuerdo” y no solo “da profundidad a la legislatura”, sino que deja a su juicio “descolocado” al Partido Popular. Entienden en el Gobierno que la pugna entre Junts y ERC complica las negociaciones porque ambos partidos se enzarzan en una dinámica de quién pide y sonsaca más financiación y competencias para Catalunya del zurrón socialista. 

Mientras tanto, Moncloa da por descontado que el PP no apoyará los Presupuestos ni la senda fiscal, después de que rechazara la planteada inicialmente y pese a que aumentaba en 12.000 millones el margen de gastro presupuestario, lo que permitiría mejorar servicios que prestan comunidades autónomas y ayuntamientos.