El Gobierno español ha anunciado este martes que retira la tramitación en el Congreso del techo de gasto, que se iba a votar este jueves en la Cámara Baja, debido a la falta de apoyos para sacarlo adelante y después de fracasar en su intento de atraer a Junts a un acuerdo para que votaran a favor de los objetivos de estabilidad presupuestaria.

El Ejecutivo ha explicado que quiere agotar todas las posibilidades para alcanzar un pacto que sería beneficioso para todas las comunidades autónomas y los ayuntamientos, ganando tiempo para negociar con los del 'expresident' Carles Puigdemont.

La votación, por tanto, no se producirá este jueves, ante la falta de apoyos parlamentarios y el escenario de una nueva derrota en el Congreso.

De acuerdo con sus socios

Sumar ha defendido la decisión del Gobierno español de retrasar la votación sobre el techo de gasto en el Congreso, dado que ello permite dar más tiempo a la negociación con los grupos parlamentarios, en especial con Junts, para aprobar la nueva senda de estabilidad presupuestaria que otorga más recursos a los territorios.

La portavoz adjunta de Sumar, Aina Vidal, ha señalado en rueda de prensa en el Congreso que ese aplazamiento de la votación, que iba a ser este jueves, responde precisamente con no paralizar los esfuerzos para conseguir tanto un "rumbo correcto" en la senda de déficit como facilitar el apoyo a las futuras cuentas públicas.

Junts exige una propuesta negociada

Por su parte, Junts ha instado al Gobierno a que presente una senda de déficit que sea "mejor para Catalunya" para poder votar a favor.

"No daremos apoyo a cambio de nada", ha advertido la portavoz de la formación catalana, Miriam Nogueras, en declaraciones a los medios de comunicación este martes en el Congreso, donde ha incidido en que darán sus siete votos al Gobierno si este presenta una propuesta "negociada" con ellos y en la que "gane Cataluña".

Para la portavoz de Junts, la propuesta del Gobierno, que iba a ser votada este jueves, "no tenía demasiado sentido" porque su grupo ya la tumbó el pasado julio. "Si el PSOE de Pedro Sánchez quieren que pasen cosas diferentes, tiene que hacer cosas diferentes", ha advertido.