El lehendakari ha realizado una declaración institucional condenando los altercados que se han producido en Madrid ante la sede de Ferraz durante las concentraciones en contra de la ley de Amnistía. Iñigo Urkullu ha condenado los hechos y ha reclamado que se desconvoque la oleada de protestas que están sirviendo de excusa para seguir generando odio, rencor y violencia".
Urkullu ha sido categórico al condenar los altercados que ha calificado como "inaceptables, muy graves y preocupantes". "La violencia no tiene cabida en democracia, jamás. La democracia es demasiado frágil como para jugar con ella. Estos ataques son inaceptables en un Estado de derecho", ha añadido el lehendakari.
Urkullu ha criticado a quienes alimentan estas actitudes de confrontación culpándoles de ser cómplices de lo que sucede. Además, ha asegurado que ante este tipo de comportamientos "la condena de la violencia debe ser clara y rotunda, sin medias tintas, sin excusas ni justificaciones".
Desconvocar las movilizaciones
Cree que ante la situación actual los partidos políticos solo tienen dos posibilidades: o bien alimentar el populismo, la manipulación, la violencia y, por lo tanto, fomentar un sistema autoritario; o optar por la defensa de la democracia, la pluralidad y las instituciones. Por eso, el lehendakari ha pedido que se desconvoquen esta oleada de protestas que está generando odio, rencor y violencia. Las concentraciones ante Ferraz han sido promovidas por 'Revuelta', una organización juvenil vinculada con Vox y con ideología de ultraderecha, pero el PP ha convocado para el próximo domingo movilizaciones en contra de la ley de Amnistía en todo el estado, incluidas las capitales vascas.
Además, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha evitado condenar las movilizaciones y en a noche del martes culpó a pedro Sánchez del descontento en las calles.
Evitar el contagio a Euskadi
"La sociedad está muy por encima de lo que estamos viendo. Hacemos un llamamiento a desconvocar la oleada de protestas que están sirviendo de excusa para seguir generando odio, rencor y violencia" ha destacado el lehendakari, quien ha asegurado que el Gobierno vasco hará todo lo que esté en su mano para evitar que este "clima de tensión y confrontación" se extienda en Euskadi.
"Esta misión debe ser compartida. Nos interpela a todas y todos sin excepción: partidos políticos, instituciones representativas de la sociedad y del Estado de Derecho; también agentes sociales y medios de comunicación. La política siempre debe ejercerse desde el compromiso y la responsabilidad con la sociedad a la que nos debemos. Sigamos construyendo en Euskadi una cultura del respeto, el diálogo y la convivencia. Un país en el que tengamos sitio todas y todos" ha sentenciado Iñigo Urkullu.